"Zapatos de gamuza color ciruela..."

       Parece el título de una canción de "La oreja de Van Gogh", pero lamento decepcionarlos... No es una canción...Seguramente los que tienen buena memoria recordarán que le di este apelativo a un calzado que compré hace algo más de un mes, y que hoy día enfundaron mis delicadas patitas.      Sin embargo, como fueron 12 horas pedagógicas de clases, con viaje incluido a Rengo a las 14 horas, los cómodos zapatos de la mañana, se transformaron en un auténtico martirio en las últimas horas de la tarde.    Al final de la jornada, llegué con mis patitas pulsando por todos los sectores en que los huesitos tocaban parte del calzado.  Me acabo de acordar del título de una novela de García Márquez, "Ojos de perro azul", jajaja,  guardando las proporciones y la jerarquía..... de García Márquez, of course...

       Estando en mi tálamo nupcial , pardón, en mi tálamo nocturnal, aún siento el dolor de las extremidades... La verdad, debí haber puesto las patas (jajaja) en salmuera caliente, a ver si se relajaban y remitía el dolor, pero ya no lo hice, piensa la Principessa, así que para qué llorar sobre la leche derramada, mejor,  en el agua con salmuera, jajaja. Sin duda, la marca no era ni Gacel ni Aldo, tampoco Clarks, sólo un dudoso nombre "Alma", que no conocía ni en la más mísera lid canina, jajaja

       Ese es el precio de la elegancia, a veces se vuelve un verdadero suplicio, aunque lo volveríamos a hacer nada más que por provocar la envidia en nuestras congéneres y la admiración en los habitantes del otro bando (es decir, de los hombres, jejeje).

      A pesar del cansancio y del sueño que casi la envían de bruces a la cama, la Principessa está contenta y agradecida: en la jornada matinal conoció un nuevo grupo de alumnos con los cuales trabajará este semestre y , la verdad, le gustó mucho : jóvenes interesados, inquietos, demandantes, con los que hizo buenas migas enseguida, logrando un muy buen trabajo durante los tres primeros  períodos de clases, mientras que en la tarde, se entretuvo con un grupo del Liceo Oriente de Rengo, con los que por segunda semana se encontraba y se divirtió bastante.  ¡Ya les veo la cara como de duda que ponen al leer esto!  Bueno, debo decirles, que desde mi perspectiva, el aprendizaje no está reñido con la entretención, la sonrisa y la broma oportuna si cabe , siempre y cuando no se pierda de vista el objetivo de las clases .....¡UFFF!  Los eyes se me cierran del cansancio y del sueño... Es que ya no tengo 15 años para dormir poco y trabajar mucho. Además, no es lo mismo estar en aula que en oficina, aunque la responsabilidad del trabajo directivo sea descomunalmente más grande... ...En fin, hasta dónde aguante no más...

     El almuerzo de  hoy de la Principessa estuvo de los más frugal que hay : desde anoche, había dejado descongelando una sopa de "margaritas" que guardé hace una semana precisamente (les recuerdo, sopas "maggie") y, aunque no logré dejarla de textura cremosa después de su pasada por los hielos eternos del refrigerador, estaba de buen sabor y caliente, que era lo que ella quería, para irse con la "guatita" temperada y satisfecha a la Villa de Rengo.

      Nuestra heroína se fue a la villa vecina en colectivo amarillo, junto con una colega de Biología que también trabaja allá los viernes y que tiene más antigüedad en esto , claro está (obvio, Principessa, si es difícil que alguien tenga más experiencia que tú, en otros ámbitos, quiero decir , en el laboral, por ejemplo, jejejeje....ups, ¡un poco más y se me enoja!).  Se fueron con bastante tiempo adelantado en previsión de los imprevistos y tuvieron razón : se encontraron con un "taco" en carretera (aclaro, un atochamiento vehicular, porfis, no esa parte del calzado, hummm) , producto, lamentablemente, de un accidente : al finalizar (o empezar, depende de la perspectiva) el taco, se encontraron con un Bus "Expreso Sta. Cruz" y dos automóviles menores volcados y bastantes averiados: uno de los autos, la verdad, estaba casi destruido completo.  El trabajo de 6 horas después de llegar al colegio de destino, le hizo olvidarse del accidente y no tuvo noticias cuál había sido su resultado.

       Siendo las 20,30 hrs. llegó de regreso a palacio. Tenía sueñooooooooooo y algo de hambre, pero se conformó con un par de Capuccinos caseros (jajajaja, leche con café) , un trozo de pan de Isla de Pascua y luego se vino a acostar, donde ahora está, en su lado B, escribiendo este relato. Jajaja, me he desdoblado, parece un cuento de Cortázar, magistral, "La continuidad de los parques" ...

      Bien. Princess, que duermas bien, sin olvidarte que aunque mañana podrás levantarte más tarde, igual debes trabajar en un reemplazo... A cruzar los dedos, y que nos vaya bien... Buenas nigth, hasta tomorrow...