sábado, 30 de mayo de 2015

"La duda puede ser tan fructífera como la certeza"

     Eso le escuché al actor que hizo de sacerdote en la película "La   Duda",  actor que ya habrá despejado su duda si es que tenía alguna. Hace unos meses, falleció (chiste cruel).  No recuerdo su nombre, pero es el mismo que actuó de Coordinador en Los Juegos del  hambre  2 y 3. Lo recuerdo como un buen actor. No obstante, no es mi objetivo evaluar sus aptitudes actorales...

- ¡Bien hecho! "Pastelero a tus pasteles". 

- ¡Puaj! ¡Me carga esa expresión desde cuando siempre se la oía  a un individuo poco consecuente y "chamullento", un profe de Matemáticas lejanooo...
- ¿Y sólo por eso rechazas la expresión? ¿No estarás siendo muy visceral? 
- Jaja...Creo que no. Te explico: resulta que en estas tierras también me encontré otro ejemplar que utiliza reiteradamente esa misma expresión (bueno, debe haber muchos en la faz de la Tierra). 
-¿Y?
- Pues, si los pongo uno frente al otro (¡sólo en sentido figurado, por favor, porque ya uno es ...¡demasiado!, jajaja) concluyo que son dos personas desagradables, en cuanto a  temperamento son la  mezcla resultante de "sanguíneo" con "colérico" (según  la clasificación de temperamentos que hace Hipócrates) de aspecto físico muy parecido: poco agraciados, morenos, con algún antecesor nativo....
- ¡Mira quién habla! ¡La Angela Merkel! Jajaja
- Jajaja. Es que lo hago de puro malévola que soy...y sin mirarme al espejo, jijiji
- ¡Caramba! No sabía que tenías un lado oscuro...
- Yo creo que una gran mayoría tenemos algún recoveco o lugar al que llega menos luz...
- jaja, muy cierto. 
- Claro que estos dos ejemplares de los que te estaba hablando, son lo contrario, más oscuridad que luz, jajaja
- ¿Tan mal te caen?
- ...Y te aseguro que yo a ellos. Es un "amor plenamente correspondido", jajaja.


    Más que ellos en sí  mismos, la verdad es que me desagradan (aunque no me quitan el sueño..., ya no) por lo que representan y reúnen en sus personas: la inconsecuencia entre el decir y el hacer, siendo casi campeones en lo primero (mucho ruido y pocas nueces), mucho discurso florido (casi llegando a la arenga), aunque también demagógico y, reiteradas veces, agresivo y violento en el tono (de esta manera se imponen a los moderados y/o timoratos), sabedores de todo (y lo que no, lo inventan), hablan en tono alto y con convicción (jaja, ya les he contado a quién me recuerda esta palabra), y, cuando NO SABEN de algún tema, no reconocen su ignorancia, sino que lanzan el conocido "Pastelero a tus pasteles" (jajaja), considerándose los mejores "pasteleros" (¡cómo no!) en su área: las Matemáticas. Con ello, aparentan "respetar" el conocimiento de otros para ocultar el desconocimiento (¡no dejan de ser vivarachos!). 

    (Les cuento que resulta curioso, por  decir lo menos, que ambos "machos alfas" tienen aproximadamente la misma edad -maduros acercándose a tercera edad-  ambos con el gusto por la Ingeniería y los números, de orientación hacia los cálculos, aunque uno no terminó y optó por la docencia -¡humm! ¡cómo para que la Educación mejore su calidad! -.Tienen una adoración impresionante por el dinero y se unen a cualquier causa que pueda reportarles algún beneficio personal. El sexo opuesto para ellos es casi una potencia elevada a cero (jajaja), por lo que son tremendamente machistas y, hasta diría, con tendencia a lo misógino. ¡Humm! No agrego nada más, aunque pudiera, para evitar que crean que soy parcial y subjetiva, jajaja).


- ¡Ahora entiendo, Srta. Princess! No debe ser fácil lidiar con gente así. 
- ¡Para nada! Personas como ellos es mejor evitarlas si uno puede, pues son absolutamente personalistas y no reconocen las capacidades del otro, menos aún si es mujer. 
- ¿No te sientes capaz de enfrentarlos?
- No, es molesto trabajar con ellos. Y no estoy dispuesta a pasar malos ratos gratuitamente, si puedo evitarlos, especialmente por un tema de calidad de vida personal. Pero como no nací ayer (ni antes de ayer, jajaja), me resguardo de sus acciones.


    Volviendo al origen de este escrito, no deja de haber una gran VERDAD en la expresión, incluso yo iría más allá, en ciertos ámbitos. Me explico cuando uno tiene certezas, descansa, se apoltrona, tiende a vegetar, física y psicológicamente. Empezamos  a vivir más tranquilos, sin tantos cuestionamientos y eso conduce indefectiblemente al anquilosamiento, a la rutina, a lo dogmático, a la aceptación. Y la grasa se va deteniendo y acumulando entre la piel y la carne y entre las neuronas (ajaja). 

   En cambio, la DUDA nos mantiene vivos, en vilo, preocupados, despiertos (a pesar que yo vivo con sueño, pero eso es para historia, jaja). La duda nos obliga a pensar, a analizar, a elucubrar y establecer distintos escenarios;  nos impele a buscar caminos para ir determinando certezas. Y en esa búsqueda, hay una suerte de creatividad permanente. Pero para que el "modus operandi" no se transforme en estable, adquiriendo rasgos propios del camino opuesto, hay que ir estableciendo procesos de revisión, en los cuales te darás cuenta que tu duda no es igual que la de hace un tiempo. Sigues dudando, es decir, pero de otra manera o, tal vez, de otras cosas. Por lo tanto, se ha producido una evolución, un avance. 

   Por eso, a dudar permanentemente, pero no de los amigos, de los sentimientos, de los seres queridos, sino de aquellos seres que no parecen ser consecuentes, de los que varían de postura con demasiada facilidad, que se ofrecen para todo y que parecer saber de todo. Dudar, observar...y , luego de aquello, llegar a una certeza. A dudar también de los dogmas, de las generalizaciones, de las verdades "absolutas", de la única versión de algunos hechos. No siempre habrá algún "gato encerrado o escondido", pero es probable que en más de alguna de estas situaciones podamos encontrarnos con una camada completa. 

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