Mientras subía al sexto piso de la torre de Palacio, escuché, como en sordina, un bullicio distinto. Pensé que se trataba, una vez más, de actividades en la Plaza de Los Héroes, así que me desentendí del tema. La Principessa aún no llegaba de su "sacrificado" trabajo, jajaja, por lo tanto yo era la "reina" de palacio en ese momento. "¿Qué podría hacer con todo este poder?".... a pensar...a pensar... a ver si se me ocurre algo interesante y entretenido....
Al llegar arriba, el alboroto existente había aumentado en intensidad, lo que reavivó mi extrañeza, acrecentada de súbito al ver las dependencias principescas cerradas.
Me detuve por un instante, para luego continuar lenta y sigilosamente. Aproveché de agarrar (pardón...quise decir "coger" ...mmmm, tampoco, ASIR suena más elegante, sin duda) un candelabro de plata (jijiji) que había en una de las mesas de arrimo de la salita de estar que permite el acceso a los diferentes cuartos...
No cabía duda: la algazara provenía de los aposentos de la Princess.
-Humm, aquí hay Garfield encerrado al parecer... ¿Esta muchachita, señorita o damisela .... habrá dejado a algún visitante o visitantes en calidad de dueños de casa o camuflados? ...Pero... ¡me habría avisado! ¿O no? ... Está bastante crecidita (bueno, no creció mucho que digamos) ....rectifico....está bastante mayorcita (¡bastante, jijiji!) como para traer invitados sin avisarme...aunque igual me da rabia...
La asesora personal de la Princess (además de Coach de la misma) no sabía si ingresar a las habitaciones de su amiga haciéndose la "loca" , tarareando alguna canción de moda (¿cuál podría ser?) u optaba por tocar . ¿Tocar o no tocar? (la puerta, por supuesto, no otra cosa) ¿It's the question?
Mientras se planteaba interiormente la interrogante hamletiana (¿así se dirá? ...suena coherente, al menos; le preguntaré a la Princess después, si salgo viva de esto.....) se acercaba en puntas de pie a la door. Se le ocurrió otra posibilidad : golpear con toda su fuerza, mientras conminaba a rendirse a los indeseados visitantes, con voz firme y potente:
- ¡¡¡Ouvré la porte!!! (¿o es fermé? Jajaja, esto de ser políglota suele jugarme malas pasadas) ¡¡¡En nombre de la Ley!!! (Nooooo, pueden ponerse a saltar de alegría en vez de hacerme caso, creyendo que es el Grupo LA LEY.... ) ... ¿No será mejor "In Nomine Patri..."? (Jajaja) ...
Optó por dejar el Candelabro en su lugar, ir hasta el sector del servicio higiénico a buscar un sopapo y mientras tocaba , tímidamente, lo blandía dispuesta a darle un "sopapazo" al primero/a que se ponga difícil. Sabía que su "arma" no guardaba relación con el rango de su amiga, pero ella, su asesora y coach, "no estaba ni ahí" con tantos rebuscamientos y finezas...
A los segundos de tocar la porte, un silencio ominoso le siguió...
- ¡Uyyy! ¡Nada por aquí, nada por allá! No se escucha nothing....upss...pero...¡ yo no estaba soñando...tampoco me estoy volviendo loca! (creo), ...no he peinado muñecas últimamente...
Volvió a tocar, esta vez más fuerte....
- ¡Toc..toc...toc...
Nothing...rien...zéro...
- ¡Chuata, recórcholis, cáspita! ...Ufff...¡A morir! ¡A grandes problemas...grandes soluciones! (¿así es?) ... ¡A ponerle el pecho a las balas, como siempre....! (Elevando a voz) ¡Cuidado, voy a dentrarrr!
Un poco tiritona, pero haciendo de tripas corazón, dispuesta a la acción sin deseos de convertirse en estatua de sal otra vez (como en aquella ocasión, para el 73, en el Pensionado de la UACh, que por creer que andaban visitantes non gratos, con sus amigas se parapetaron en una habitación y no se movieron por horas y...al final... nunca hubo nadie, eran sólo ratones, jajaja....uyyy, se me cayó la sota, jajaja), empujó la puerta, que sonó sobre sus goznes y se fue abriendo... len...ta...men...te...
Con el sopapo en ristre, ingresó a los aposentos...miró para todos lados...y ¡no vio nada fuera de lo habitual! Sin embargo, sabía que no estaba soñando, que no se lo había imaginado...
Caminó por la dependencia principal, y cuando estaba cerca de la box spring
king (que estaba toda revuelta y desordenada, con una serie de cosas sobre ella).... vio.... que... se.... iban.... asomando... unos ... antiguos ... conocidos....
- ¿Qué hacen ustedes ahí? ¿Quién los autorizó para organizar ....esto?
- ¡Hemos decidido...!, empezó diciendo el que parecía ser el cabecilla de la "revuelta"....
- ¡A ver...¡Salgan todos de ahí! - les ordenó- y explíquenme enseguida lo que sucede aquí!
De a poco fueron saliendo de un costado de la cama donde se habían atrincherado.
- ¡Es que al fin vamos a poder descansar de unos meses de arduo trabajo! Felizmente, como somos varios, pudimos turnarnos, pero igual nos hemos agotado y consideramos que nos merecemos un largo tiempo de asueto, ¡vaya que sí!
- ¡Qué mal agradecidos son ustedes! La Princess los trata bien: los lava de vez en cuando, no los deja botados ni abandonados, algo arrugados suelen estar (no más que la dueña, jijiji) pero ordenados y dobladitos... ¿Qué más pueden pedir?
- ¡La jubilación! Poder irnos a retiro pero con un buen sueldo...
- Jajaja, ¿no quieren algo más los perlas? ¡Qué ilusos! Están igual que nosotros, los humanos ...o humanoides : disconformes por naturaleza... Sigan así no más y van a tener otro fin...
- ¡La típica amenaza de los poderosos!, contestaron los pijamas, pero...a ver...a ver...¿Qué nos va a pasar que ya no nos haya pasado? ¡Dinos!
- ¡Son bien patúos ustedes! ¡Agradezcan que no está la Princess! ¡Si estuviera ella otro gallo les cantaría!
- ¡Parole, parole, parole!
- ¡Yo misma, como en otras ocasiones, la voy a aconsejar : por ejemplo, que los envíen al Hogar de Cristo,.... a la bolsa de la basura o... que los transformen en "trapeadores" (especialmente a los más "viejitos"). Así que, mucho cuidado...
No se quedaron muy contentos, entre ellos hablaban algo que no alcancé a entender, salvo unas cuantas palabras sueltas: sindicato ...pliego...peticiones...huelga... (jajaja)
- ¡Ja! ¡Ahora sí que estamos "daos" : ¡la rebelión de los pijamas!!! ¡Este mundo está loko!.-
De pronto, antes de darme cuenta, los "insurrectos" y "sindicalistas", en un abrir y cerrar de ojos, "vuelan" (literalmente) a los cajones de la toilette, desde donde habían salido inicialmente para su movilización-carrete. Todo queda en silencio un momento, el que se rompe cuando escucho unos pasos, los de la Principessa, que viene subiendo la escalera. Sus zapatitos de cristal resuenan en el mármol.
- ¡Ajá! ¡Revolucionarios de pacotilla! ¡Ha sucedido lo de siempre: los encendidos discursos reivindicativos de las clases proletarias se acallan ante el poder de la nobleza, jajaja! ¡Nada ha cambiado : ¡vamos bien, mañana mejor!!
¡Buona sera!
No hay comentarios:
Publicar un comentario