Otro día más...

       Ayer viernes, casi de noche....

     El olor a pan quemado ya había sido  olfateado hasta  por don Bernardo (que está en su caballo al centro de la Plaza) y la Principessa no se daba cuenta que sus dos mitades de pan frica que estaba tostando ya habían pasado hace un rato por el Paseo Ahumada (jajaja). Estaba preparando una palta y se había dsitraído y no captaba el inconfundible aroma a algo  más que tostado. Cuando se dio cuenta casi lanza un exabrupto (dudó entre decir "recórcholis" o "recáspita") y en esa duda, pasó el momento y, al final, no dijo ni lo uno ni lo otro. Rápidamente "agarró" sus dos mitades de frica, apagó el gas, y,  acto seguido, se dispuso  a raspar enérgicamente cada mitad para eliminar lo quemado. Mientras realizaba tan ingrata labor, se pensó en el  lado positivo del percance:
    1.- Dicen que el pan quemado sirve para el dolor de estómago, así que cuando le duela ya tiene  el remedio ingerido, jajaja
    2.- El pan tostado hace engordar menos (porque al tostarse este alimento pierde sus principios activos para el engordamiento, jajaja).-

      Así que no hay mal que por bien no venga.

    El rico sanguchito contó con una palta molida, una hamburguesa (cocida, jajaja), brotes de alfalfa y salsas varias (mayonesa, mostaza, pasta de ají, salsa yoghurt-ciboulette) . ¡Quedó exquisito realmente!

   Se acostó pensando que debía adelantar sus relojes (¡zaáa!) y celus una hora, pero como estuvo dormitando en su bergère, luego de engullir su pantagruélico "sánguche", le costó procesar la información así como le costó recuperar la lucidez para conducir su bello cuerpo hasta su cama, en el piso superior.  No pudo leer, aunque hubiera querido;  ya era cerca de la medianoche y al escucharse las 12 campanadas,  así como por arte de magia, sería la una de la madrugada. Por lo tanto, si se esforzaba al límite, al día siguiente estaría como un vulgar estropajo (en cuanto a   su vitalidad, quiero decir, no a otro aspecto).
    Despertó varias veces durante la noche, y en la mañana su celudes también lo hizo, a su modo.

    ....Riiiiiiiinnnngggg.....

   Sábado 6....

  - ¡Diablos! - exclamó.- Me da lata levantarme tan temprano, ¡tengo sueño! , pero ...¡es una hora más tarde!  ¡Felicitaciones a quien se le ocurrió esto! Humm....-

      Dióse vuelta y siguió durmiendozzzzz......

    - Upsss, de nuevo al mundo de los vivos y conscientes... Son las 9,30 hora antigua... ¡¡¡Chanfle!!! Las 10,30 hrs. ¡Uyyy, qué tarde!... ¿Me lavo o no me lavo? Total, no voy a sdalir a ninguna parte hoy... (jajajaja, excusas, te estás poniendo "cochina ", Princess, parece que mientras más  años, pardón, más primaveras, más temor al agua, jajaja).
    - ¡Ya,  a lavarse mejor!, ¡DUcha: aquí voyyyyyyyy!
   

    Más tarde, al bajar al comedor y comenzar a preparar su frugal desayuno ( un capuccino con "chorrocientas tostadas" (¡qué frugal!, jaja), en Televisión comentan que el sábado a medianoche debe cambiarse la hora y estaban entrevistando a una psicóloga para saber los efectos o "traumas "  que en los infantes provoca el cambio horario (jajaja, se ríe por los "traumas infantiles" y por su equivocación). Anoche pensaba adelantar los relojes y la flojera no la dejó... ¡Por suerte! Habría andado más perdida que el teniente Bello...
    Contenta por haber "ganado" una hora y por el sol que veía, procedió a sacar sus Srtas. Plantas a tomar los cálidos y beneficiosos  rayos sabatinos.
    

     Luego, comenzó a buscar material para elaborar un trabajo pedagógico especial, pues piensa participar en un concurso, un desafío nuevo, para el cual tiene el tiempo y las ganas requeridas. Total, nada pierde con aquello; al contrario, tal vez pueda salir ganando. Ya tiene la idea dando vueltas en su cerebro y comenzará a plasmarla en el pc.
   Después de trabajar un rato, recuerda que se había comprometido con ella misma a aprovechar el "finde" para realizar un aseo a fondo de su dormitorio, además de cambiar la distribución de los muebles. Aunque, para ser honestas, no tiene muchas altenativas, pero algo se puede hacer.
   Se arremangó, buscó una mopa o algo parecido y comenzó a mover cama, toilette, veladores, balets, mueble de Tv, etc. Y ....a limpiar todo el polvo, cabellos, vellos, pedazos de uñas,  (¡puaj!,  Princess, no seas tan específica) acumulados durante el invierno. Todo lo hacía, mientras  pensaba en llamarle la atención a la servidumbre que no hacía sus tareas como debía (jajaja, Princesss, ¿desde cuándo que tienes servidumbre? Eso fue en el caso de tus aaaantepasadoooosssss, hace ya bastante tiempo atrááááás, jaja).
    Después de limpiar alfombra, muebles, mover todo lo movible, TENDER su cama (lo que hace habitualmente es extenderla ....cuando lo hace....jajaja) , se sintió satisfecha. Había hecho una buena labor, se sentiría más a gusto,  menos culpable, con la concienca liviana....Y esto no dejaba de ser significativo, sobre todo ahora que vivía sola, sola... Su conciencia solía hacer acto de presencia sin necesidad de ser llamada;  a veces, se acercaba despacio, haciéndose sentir...; otras veces, lo hacía abruptamente "pillándole" por sorpresa...
   Esto de tener tiempo libre y además, conciencia, no deja de ser,  a veces, una incomodidad... No te queda otra que enfrentarla y no siempre sales bien parado de ese "encontrón", más que "encuentro" .

Ensalada de lechuga escarola con brotes
de alfalfa con adornos de morrón de
diversos colores. ¡Fresquita!

   Su almuerzo no le dio mucho quehacer, pues ya lo tenía preparado desde ayer, a excepción de la ensalada. De manera que resultó una tarea grata y fácil de abordar.  
 

  -¡Ahhhhhjjjj!- bostezó ruidosamente la Principessa, dejando de lado toda regla de urbanidad y decoro (jajaja).- "Ya me dio sueño otra vez", ni que tuviera anemia... ¿capaz? Nooooo, de ninguna manera...Si ahora mismo tengo un haaambreee. El problema es que en la despensa no hay nada que me apetezca....grrrr!!... Hoy es de esos días en que uno se pone exquisita y aún teniendo alimento, nada le basta. Deberé pensar en los niños de Africa, para encontrarle gusto a lo que coma. Si no tuviera hambre no sería problema, pero ya me duele el estómago (jajaja, me acordé del pan quemado de anoche, que es bueno para el dolor estomacal, jajaja)  de pura hambre... Hacía tiempo que no sentía esto.... 

    Había estado toda la tarde en Irak, entre Bagdad y la ciudad de Safran, realizando un trabajo de campo buscando tablillas milenarias enterradas bajo la amarilla tierra de esa localidad, entre el calor del clima y la tensión de la inminente guerra e invasión del país por parte del ejército de Estados Unidos. Eso debe haberle dado tanta hambre (jajaja).

   Avanzó bastante en la novela La Biblia de barro de la escritora española Julia Navarro durante la tarde, pero debió dejar sus páginas digitales, luego de temer que le salgan escaras de tanto estar tendida en su sillón favorito. Parece que cada vez está más duro... o ....la piel de la Principessa, más delicada.

Tostadas bien "tostadas"

    Estaba a punto de comenzar a servirse un té con tostadas (más quemadas que tostadas, ¡otra vez!) cuando suena el celular : ¡La Reina María Antonieta! ¡¡Nooooo!!, ¡qué le corten la cabeza!, le dieron ganas de decir, como el personaje de Alicia en el país de las maravillas (jajaja).

    ¿Qué quería su majestad?

    Que vaya a sus dependencias a ver un documento o venir ella a palacio. Grrr!!! Escuché a la Principessa señalar que iba a tomar once y cuando la Reina se molesta por no atender su exigencia, señalando que no quiere dar explicaciones por teléfono porque no quiere seguir hablando por celular ...¡Plop! La Princess casi le dice "Chao, no más" (jajaja) y le dio bruscamente término  a la llamada.

   Luego se instaló a tomar once feliz (jajaja).

   Al rato..... ¡ringggggg! El celular otra vez... De nueva Eeeelllaaa!!! Había moderado su tono, y señalando que "ya que la Principessa NO PODÍA IR " le explicó lo que correspondía.

    Bueno, pensó nuestra amiga, al menos la Sra. aquella , al parecer, recapacitó y prefirió volver a llamar... ¡Esto de las relaciones humanas es una cosa bien complicada  a veces!

    Mientras  terminaba de tomar su once, llegó la noche, en la cual, esta vez sí debe adelantar la hora (no te olvides , Princess). Se preparará un té que llevará a su cama, mientras mira un poco de televisión y lee unas nuevas páginas, antes de entregarse a los brazos de Morfeo. Mañana se levantará temprano, para preparar sus clases desde temprano. A mediodía, irá, como de costumbre, a visitar a su Infanta, llueva o truene.

    A pesar del sueño un poco permanente, está siendo un fin de semana descansado, tranquilo y provechoso, lo que no puede dejar de reconocer, aunque haya vacíos ya imposibles de llenar.

    ¡Ánimo, Princess : la vida es así... y hay que asumirla como venga, tratando de minimizar los efectos en lo que se pueda, gozando  y atesorando los momentos felices...para aferrarse a ellos cuando sea necesario!

     Mañana será otro día... Por el momento, qué tengas buenas noches y que descanses, otro tanto... ¡¡Hasta tomorrow, Principessa, hasta tomorrow!!