"Salvavidas" : Árboles y Flores del Sur...

Sábado 20, último día en Valdivia para la Principessa.

¿Adivinen cómo amaneció el día? Jajaja

    Lógicamente nublado, con amenaza de pronta lluvia, a cargo de unas nubes bajas y oscuras (no les califico de "negras" para no ser acusada de racista, jajaja).
   Salió con la Reina-Madre, premunidas de algunos adminículos para instalar unas fotografías adhesivas del Rey Asendino, tarea pendiente. Se instalaron a esperar el carruaje que las conduciría al Parque, pero luego de un rato, desistieron y se fueron a apostar a otro paradero, para luego iniciar trayecto caminando. Al parecer, los aurigas estaban aún durmiendo.
   - ¡Eureka! Alli viene uno, exclamó la Reina, quien, rápidamente lo hizo detenerse. ¡Arriba, las pasajeras reales!

Ya están en el parque. Pasan a comprar las flores necesarias, caminan hasta el lugar donde descansa el Rey- Asendino. El césped está un poco crecido, de manera que sus aristocráticos zapatitos absorben todas el agua-lluvia.

- ¡Diablos! , exclamó la Principessa. ¡Se me mojaron las patas!!! (jajaja) . Se me "pasaron" los zapaticos...

¡Esta Princess! ¡Cuando una emoción fuerte la embarga(ya sea positiva o negativa) parece una verdadera feriante o mercader (con el perdón de estas esforzadas y plebeyas personas)

      - ¡Princess! ¿Cuál es la marca de tus "zapaticos"?
   - Hummm! No te lo revelaré para mantener la exclusividad...
   - ¡Zaáaáá! Jajaja..

Los "zapaticos" de mi amiga son unos botines de media caña de gamuza, que, obviamente, son más adecuados para el frío que para la lluvia, pero ella no siempre logra el proceso de adaptación en el mundo cotidiano normal. ¡Claro, ella es una Principessa! Jaja
La lápida del Rey-Padre queda hermosa, con flores coloridas y tres fotografías de él. Le acompañan un rato, tratando de resarcir el tiempo de ausencia y luego se retiran. Es el momento en que nuestra dilecta amiga observa la floresta y decide dejar registro de las especies que llaman su atención, con imágenes, especialmente de sus flores.

-¡Ya te las estás dando de naturalista de nuevo! Charles Darwin quedó chico al lado tuyo, Princess. ¡Por suerte no te ha dado por los bicharracos! Jajaja...

La Reina-Madre la acompaña en su desvarío botánico y sacando fotos, tratando de recordar nombres y clasificaciones, se entretienen un buen rato.
Al finalizar esta tarea científica (que nada tiene de científica, la verdad; aficionadas en grado sumo) caminan a la salida del Parque, llegan al paradero y esperan el carruaje que las dejará cerca del palacio materno. La Principessa se siente satisfecha de haber visitado a su padre, de haber acompañado a su longeva madre, así como de haber "cazado" imágenes de la belleza natural del Reyno de Sta. María la Blanca. ¡Bien, Principessa, qué grande eres! La próxima vez que viajes a este Reyno, seguro que desearán entregarte las llaves de la ciudad ...o del Reino (A.J.Cronin, jajaja) .

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     Mientras escucha, sentada en su sillón favorito, la hermosa canción de Jeon Soo Yeon, "Birch Forest" (Bosque de abedules), la Principessa recuerda los hermosos y jóvenes abedules que habían en el prado y área verde de la Facultad de Letras de la UACh, cuando era estudiante (¡Buúúúú!). Llega a su memoria la imagen de su querida brujilda amiga y ella, cuando se ponían bajo los abedules, después de una lluvia, para recibir las gotas que quedaban en sus ramas. ¡Hermoso y casi insustancial recuerdo de momentos de felicidad juvenil...
       "¡Juventud, divino tesoro,
        Ya te fuiste para no volver...!"

      Especies arbóreas del Reyno de Santa María la Blanca pesquisadas :