Casi sin fuerzas se levantó el lunes, luego de acostarse tarde el domingo, por haber estado mirando Máster Chef, a pesar que a doña no le gusta tanto como aquel donde aparece el Príncipe Carlo que cocina ( jejeje) ..............
- ¡Uff! Estaba rico el sanguchito.
- Oye, ¿y no vas a almorzar? Ya son las 13 hrs y estás comiendo sándwich!!!
- Es que tenía hambre: debe ser el estrés vacacional, jajaja.
¡Ufff!, se me revuelve el rico sabor del sándwich de pan francés con el olorcito que ingresa por la ventana que da al balcón y hacia la calle. La ciudad parece una verdadera cloaca. Nunca he estado en una cloaca pero así debe ser. Aparte del ruido y bullicio permanente, están los malos olores en la urbe capitalina de más de 6 millones de habitantes..."Hoy día 6 millones más 1" , piensa la Principessa. Se requiere abrir las ventanas, pero la contaminación de todo tipo se impone. "Si mantengo las ventanas cerradas, se encierra el calor, si las abro, hay que aumentar el volumen del TV o Radio y taparse la nariz, además de que te envuelve una sensación de irrealidad increíble con ese bullicio permanente de todo el día".
Hoy martes parece no ser tu día Princess.
Ayer lunes la levantada fue temprano. Tenía una tarea a la cual abocarse: imprimir 387 páginas de escritura e imágenes, el resultado de sus escritos de 6 meses en el BLOG, transformados en un volumen de lectura. El domingo se dedicó a dejar completamente diagramada cada página, para proceder a la impresión el lunes. Tendria que hacer funcionar su impresora a como dé lugar, aunque pareciera que salió con falla de fábrica (la impresora, jajaja), porque cuando le da ganas imprime y en muchas ocasiones, la Princess se ha aburrido y ha terminado por salir de palacio y buscar un cíber para imprimir.
Luego de realizar su tradicional desayuno, (un capuccino con una barra de cereal) se abocó a la tarea de intentar abrir la panza de la impresora para sacar los cartridges (cartuchos en chileno de a pie)
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(¿Se pondrán rancias las galletas? ¡Guácala! ¡Qué malas! Mejor las envío directo a la basura antes de que me provoquen un serio problema estomacal... Se me acabó el hambre...Hummm, acabo de descubrir una dieta : guarde galletas por años de años y cuando estén así de añejas, rancias e incomibles, trate de consumirlas. Aparte de inducirte a correr (...al baño, jaja), no te quedarán ganas de comer nada más por un buen rato...)
Bueno, íbamos en que ayer lunes en la mañana se dedicó a buscarle la panza a la Impresora para sacar los cartuchos, que debería ir a cargar con tinta, aunque en esos locales se hable de recargar...Pero como ella no cargó originalmente las cajitas aquellas, obviamente no puede "recargarlas", sino sólo "cargarlas" (¿me entienden, verdad? Estoy tratando de ser lo más clara posible...). Logró moverle una tapa que da vista al carrete de impresión, pero no divisó por ningún lado los cartuchos.
- Humm, buscaré el manual de la printer. A buscar, a buscar...a buscar.....Por aquí, por allá...¡Recórcholis! ¿Dónde diablos habré dejado aquella bolsita plástica con un cd y el manual? ¡¡¡Chanfles y rechanfles...!!! Voy a tener que empezar a anotar todo, como en una especie de Bitácora, claro que si se me pierde la bitácora...hasta ahí no más llego.-
Al fin encontró la bolsa con los documentos de la printer, pero no había ninguno que explicara cómo despanzurrar la impresora.
- ¡Y ahora! : ¿quién podrá defenderme? El Chapulín ya se murió ....(qué mal chiste, fome total) ...Uff, ya son las 10,30. Tendré que ir al local donde la compré, Pcfactory . ¡Por suerte no queda lejos!
Se preparó para salir (es decir, se cambió zapatos y se puso chaqueta) y se dirigió al local de computación donde compró la printer. Amablemente la enviaron al servicio técnico, segundo piso, para explicarle lo mismo que ya había hecho. No había otra forma, jajaja. Regresó a palacio, enchufó el aparato y los cartuchos se dispusieron justo en el medio para ser sacados por una manito principesca...¡Claro, ahí estaba la solución: había que enchufar la printer, jajajaja! (la Principessa parece andar en estado de shock, la noto leeennnttttaaaa). Luego de sacarlos, bajó de nuevo a la calle al local de "recargas", esperó que cargaran sus cartuchos y se fue a palacio. Ya eran las 11,30 hrs. Los instaló y se dispuso a imprimir: ¡estuvo media hora prendiendo, apagando, dándole la orden de imprimir, presionando el botón de resetear para eliminar las luces amarillas que mostraba...y... NADA de NOTHING, grrrrrrr, ayyyyyyyyyyyyyyy!!!!! Al final, después de apagar el pc, desenchufar impresora, volver a conectar a la corriente y prenderla, finalmente comenzó a imprimir.
Comienza su tarea, de diez en diez, de 25 en 25 páginas...hasta que.... ....pág. 126, queda mal impresa, pág 127, peor impresa.
- ¡Diablos, se acabó la tinta negra! ¡A este paso, voy a necesitar 3 recargas y me quedaré corta! Casi son las 13 horas: voy a bajar a cargar el cartucho negro, las fotos se ven bien aún......
Averigua el horario del Sr. Recargador de tintas para la próxima visita, pues no tiene cartuchos de ese tipo que le vendiera a la Princess. Ahí el amable señor le pregunta en qué modalidad está imprimiendo (casualmente la Princess, en todos sus intentos de hacer funcionar la impresora había observado el menú de impresión y era standar). El buen hombre le sugiere que utilice "borrador" pues una Canon imprime incluso en aquella configuración con bastante calidad. ¡Buen dato, piensa la Princess, así necesitaré sólo 3 cartuchos!
Sube a palacio y reanuda la tarea. De nuevo se taima la printer. La Principessa insiste, pues sabe que no tendrá otra ocasión : en la tarde irá al Parque a visitar a su Infanta, lugar donde la acompañarán varios amigos, a quienes ha invitado a palacio después. El martes partirá de madrugada a la gran Capital a realizar un trámite que no puede soslayar y se quedará hasta el viernes en la mañana para retirar el documento que demora 4 días en estar listo....y el viernes 5 en la noche viajará a la Perla del Sur, Sta. María la Blanca, al encuentro con la familia, por el cumpleaños número 90 de la Reina Madre, ocasión para la cual está imprimiendo estas páginas...... Por lo tanto, "por la razón o por la fuerza", este aparatito deberá funcionar nuevamente. ....
....¡Eureka! ¡Al fin! Pasados unos minutos de pelea encarnizada, apretando teclas, apagando, desenchufando y volviendo a enchufar, logra retomar la impresión: de 25 en 25 páginas... Mira el reloj, ya son las 13,30 horas, pero, no, primero es lo primero.... Las imágenes siguen saliendo coloridas, la impresión es más rápida, el trabajo avanza...cruza los dedos, toca madera...página 375...¡Bien! La última orden : 376-387.... La Principessa apenas respira, mira cómo van saliendo las hojitas completas, desde atrás hacia adelante...378...377...376....
Ahora, a ordenar...., pues más de alguna página cayó al suelo en el momento en que iba saliendo del "horno" y no supo a qué página correspondía. Y aunque insertó número de página al escrito, éste se notaba en pantalla pero no al imprimir (otro detallito para el aprendizaje, Princess). "¡Humm! Si mando a anillar las 387 hojas juntas (pues pretende mandarlas a anillar) va a quedar un mamotreto imposible de cargar y manipular... A ver... a ver... 387 ÷2=193,5... ¡Humm! A separar en dos posibles volúmenes de 190 páginas uno y el otro, con las restantes...a ver qué resulta".
¡Bien! Ahí se ven más manejables.... Ufff, las 15,15 hrs. A almorzarrrrrr ahora....
Rápidamente almorzó, dejó todo lo ordenado posible..., se cambió ropa, bajó con los dos volúmenes hasta un local de fotocopiado ubicado frente a la plaza para que se los anillen... Le pidieron que espere, que hacían el trabajo enseguida... 20 minutos,,,25.... ¿Falta mucho? ¡Casi listo! Bien... a pagar y regresa a palacio, pidiéndole al mayordomo real que le deje en la salita de entrada al castillo los libros y ella los pasaría a buscar después...al regreso.
Ahora, directo al Parque....¡¡¡Ufff, qué calor!!!
¡Hermosos claveles compró esta vez para adornar la sepultura! Quedó hermosa... Todo a tiempo, ahora a esperar que lleguen mis amigos...
(-Oye, Princess...Sácame de una duda: si tú no eres creyente, ¿por qué siempre pides que te ayuden con una liturgia para la Infanta?
- Porque si bien es cierto yo no he logrado creer (y no pienses que no lo he intentado), puede suceder que los creyentes tengan razón. Y ahí se justificaría y cobrarían absoluto sentido las palabras, los cánticos y las oraciones de quienes creen...No quiero negarle esa posibilidad a mi querida hija...)
Fue una linda ceremonia, preparada y guiada por su amiga Eli y acompañada por los demás... a todos quienes agradece de corazón su tiempo, su disposición y su compañía...
- De regreso, fuimos a palacio, donde estuvimos conversando relajadamente un par de horas... Fue grato compartir nuevamente con algunos de ellos a quienes no había visto en todo el año. No es mucho lo que uno puede ayudar en la tarea diaria, pero ya el hecho de tener un encuentro y un intercambio de buenos y malos momentos, aligera el peso... Espero que así haya sido... Es mi pequeña contribución por el cariño demostrado...
El lunes ya finaliza. Logró cumplir sus tareas y compromisos. Dejó todo ordenado y se fue a acostar, pues el día martes debía viajar a la capital a hacer trámites.
Martes 2
- Uff, muy temprano para llamar a la Reina Madre por su cumpleaños número 90 (¿Llegaré a los 90 yo? se pregunta la Principessa. Si estoy tan cuerda como hoy (que no es tanto tampoco) y bien de salud, bienvenidos 90. Pero si no es así... ¡Tonterías de las que me preocupo! En fin...)
Arregló su mochila viajera e inició la salida. Antes de salir echó agua a sus plantitas y se despidió de ellas, recomendándoles que se porten bien (jajaja). Llegó al Terminal y antes de subirse a una diligencia, se dispuso a comprar sus pasajes para el viaje a Valdivia. Bus Norte, a pesar de su escuálida colación de viaje, era el más económico....pero no tenían sistema de Red compra. Tres cajeros en el Terminal O'Higgins ...y ninguno en funcionamiento (dos sin dinero y uno estaba en reparaciones, jijiji) . Imposible comprar pasajes...¡A tomar la diligencia!
........
¡Llegando a Santiago City! Antes de ir a Morandé 440 (no se me olvida el número pues me acuerdo de Juan Luis Guerra, jajaja) debe comprar sus pasajes. Espera que aquí haya (¿o haiga?, jajaja) sistema de red compra. ¡Eureka! Le resultó : debió pagar 4 lukas más pero logró su objetivo.
-¡¡¡Ya!!! Ahora, directo al CBRS (Conservador de Bienes Raíces de Santiago). ¡Mucha gente! "¿Es que esta gente no trabaja que anda haciendo trámites por acá?", se pregunta doña Principessa. En fin... se resigna a hacer unas cuantas filas ...o colas... 3 en total... Consigue su objetivo y deberá volver el viernes a buscar el documento....
Ahora, ....es ¡¡¡¡Libre!!!!
- Hummm, el único problema es que anda con su mochila a cuestas... Pero, hay que hacer ejercicios... A caminar...a caminar.... desde Morandé 440, pasando por Paseo Huérfanos hasta Ahumada, Mc Giver..etcetc...hasta llegar a Lira 360. En total, unas 14 cuadras que hizo pensando en los beneficios que recibiría su esbelto cuerpo (jajaja). 
Ahora, ya en en palacete de su Infanta, se dedicó a abrir ventanas, a preparar su almuerzo y a ...¡descansar!, sin olvidar de llamar a la Reina Urbana para saludarla en su día.
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Miércoles al horario del desayuno. Ducha exquisita (algo rico, al menos, jajaja). La luz del día y el bullicio de la calle Lira me despiertan. Debo recordar que es día laboral para el resto de los 6 millones. SOLO YO estoy de vacaciones (eufemísticamente hablando, jajaja...¿o debo decir "desocupada" o "cesante", simplemente). Me peso, 1 kilo menos. ¡Bravo! Me preparo para ir a desayunar. Prepararé mi capuccino y me comeré la unica barra de cereal que me queda: es de manzana (¡puaj!, me cargan las barras de este sabor así como las de chocolate)
- ¿Y para qué compras algo que no te gusta, pues Princess?
- Bueno, tanto como que no me gustan no es, me gustan menos, los de chocolate si que no me gustan y de ésas no compro nunca.
- Oye, pero, tú misma has dicho que uno no debe conformarse con sucedáneos. "Si no es el hombre perfecto, ¡prefiero estar sola!" Ésas han sido tus palabras... ¿Eres una versión femenina del Capitán Araya? Jajaja
-No, nunca tanto. Lo que sucede es que en lo que respecta a productos de comida o remedios, por ejemplo, de pronto uno no puede ponerse tan inflexible. Aquello no te va a cambiar la vida, como, por ejemplo, la presencia del... ¡enemigo! Jajaja.
Es extraña esta situación, no la del desayuno sino lo que parece estar viviendo la Principessa. Desde el lunes que se siente como a la deriva, no le encuentra sentido a lo que hace, y lo que hace le parece, después de realizado, una mala idea... Mientras come, pierde el deseo de comer; en otros momentos, quiere comer otras cosas y busca, pero nada de lo encuentra en su despensa le agrada. A este paso, o engorda como una ameba o se transforma en un saco de bones (me acuerdo que esa palabra me la dijo la Infanta en una ocasión, cuando me comentó que le gustaba una serie que llevaba ese nombre = "huesos"; después de ello, no se me olvidó nunca más).
Termina de comer su barra de cereal de manzana y nota un gusto medio extraño, así que revisa la fecha de vencimiento: jajaja, estaba vencida en el mes de mayo de este año. No hace tanto tiempo. "Peor es en la guerra", piensa.
Busca en el programa del cable televisivo a ver si hay alguna peli interesante, nada por el momento, que le permita hundirse en otra dimensión. Bien, Principessa, a enfrentar este momento. Ya es hora, llevas 3 días en esta onda... y bien "honda" también jajaja. Pon a funcionar tu piano (en Santiago también tiene un piano, jajaja) y dedícate a descubrir lo que pasa y a escarbar en esa maraña de ideas, deseos, inquietudes y desgano que tienes... Cierra los ojos, lleva tus manos a ambas sienes y... ¡relax!
Mientras revisaba lo escrito, decidió caminar un poco y salió del edificio en dirección al Súper Ekono. Antes de aquello, tendió su cama, desenchufó el refrigerador y lavó la loza que se le había acumulado. Ya en el súper, compró varios productos de primera necesidad y, satisfecha de su incursión en el mundo real, regresó al refugio de su Infanta. La alta temperatura le obligó a cambiar vestimenta y así estar más cómoda enfrentar el término de su escritos.
¡¡Bien!! Costó pero lograste llegar a puerto. A centrarte nuevamente, Principessa. No es fácil acostumbrarse a la vida capitalina, pero se puede. ¡Tú puedes, siempre puedes! ¡Adelante! (BBVA, jajaja).
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