Semana Sonambulesca

Lunes 4 y Martes 5 : Bajoneo a mil

 

    Cuestionamientos existenciales y profesionales, necesarios, en todo caso, de vez en cuando, fue lo que dio vueltas y vueltas por la cabeza de nuestra amiga, hasta que decidió actuar. Esto ya lo expuso nuestra novel escritora en su escrito anterior.  

 

Miércoles 6: Levantando la cabeza...

 

     Amaneció un día oscuro ; hubo  lluvia desde la madrugada, que se sentía en el techo del castillo, en sus almenas, torres y demases. Un día así  se hace lento.
      Hasta internet estaba lenta, adormecida, amodorrada, aletargada a pesar de las más de las 9 horas, cuando dio inició a su trabajo en casa. 

       Estaba dispuesta a trabajar en la creación de material novedoso ( al menos eso cree ella, jajaja), para amenizar y enriquecer sus cátedras,  poniéndoles el sello personal correspondiente: ejercicios de vocabulario, un power de figuras retóricas con imágenes, enriquecimiento de un ppt de revisión de un ensayo, haciéndolo más atractivo ( así como ella, jajaja) . Suponía que pocos alumnos llevarían el folleto solicitado y no podía estar trabajando sólo con su ejemplar,  sin el respaldo necesario.  Durante la mañana avanzó en los powers de vocabulario, en tanto en la tarde complementó el ppt que se requería. Estaba comenzando a completar el power de figuras retóricas cuando ya eran las 17,30 hrs. y se había comprometido a participar en un Encuentro de Lulús, con el objeto de dar la bienvenida a la lulú viajera de las Europas. Así que se preparó para salir con el claro propósito de que, al regreso, terminaría lo que le faltaba, fuera la hora que fuese.
    El encuentro estuvo entretenido.  Una rica once en compañía y luego, a mirar muchas fotografías de recuerdos de la  viajera, que mostraban sitios de Francia e Italia.
    

     Ya de vuelta a palacio, se sirvió un café bien cargado y se dispuso a la tarea. Trabajó hasta cerca de la 1 de la madrugada pero valió la pena. ¡Ufff, estaba cansada! El día había sido de mucha exigencia intelectual y técnica. Se durmió cerca de las 2 de la madrugada, aunque le hubiera gustado darse más tiempo para descansar. Ahora,  lo relevante era que tenía las herramientas pedagógicas adecuadas ( eso pensaba ella, jajaja) para enfrentar exitosamente sus clases.

 Jueves 7: De nuevo a la pelea....

     A pesar de no ser "crespa" (jajaja)  madrugó ( 6,15 hrs.) dispuesta a la lid. Ese día sólo trabajaría  en la jornada matinal, pero en esas horas precisamente era en las cuales debería validar el material preparado.
    Al final de la mañana se sintió satisfecha : había logrado su objetivo con un alto grado de aprobación. Sólo  habría que hacer algunas modificaciones para transformarlo en óptimo. Se  sintió contenta : el esfuerzo había valido la pena. 

 

       Antes de irse a palacio, luego de terminada su jornada, pasó al Súper, compró un par  de cosas y se dispuso a subir hasta su torre.
    Los almuerzos de estos días de trabajo fueron auspiciados por las tareas culinarias del domingo anterior, día en que la Principessa, al parecer, adivinando lo que iba a pasar, cocinó para un regimiento. Así que estuvo, alternadamente, con carne y ceviche, más las  ensaladas del día.

Acto de entrega de Carros de Bomberos en
Plaza de los Héroes

    Almorzó con rapidez. Sólo se detuvo en su  postre, en el cual mezcló pera, mandarina y manzana picadas con crema. Cuando le echó la crema a su esperado postre, se dio cuenta que estaba demasiado líquida. ¡Algo andaba mal! ¡Nooooooooo, mi poooostreeee!!  No echó nada más, olisqueó la crema (cual sabueso profesional) y notó el olor agrio... Miró la fecha de vencimiento y ....¡hacía un buen  rato que ésta había pasado!  ¡Uyyyy, mi postrecitoooooo!  Como no alcanzó a echarle mucha crema no se deshizo de su preciado y dulce alimento  (sí de la crema) y  probó con  cierta reticencia una cucharada de sus frutas, hummm!!  Casi no se notaba, así que ¡a morir!!!   Luego, se sirvió sus tés frutales bien calientes y solucionado el problema.  Su algo le hacía mal al estómago , ya sabía a qué se había debido, así esperó confiada en que su fortaleza física ganaría la batalla contra la crema ácida, jajaja

 
     Aunque hubiera querido descansar esa tarde, no pudo hacerlo : debía preparar las doce horas de clases  del día  siguiente. Serían  las últimas sesiones con ambos grupos ( uno en Rancagua y el otro  en Rengo y  quería dejar un  buen  recuerdo profesional).

     A ratos escuchaba  sonar el aviso de llegada de e-mail, por lo que revisa su celu-top : ¡decepción! ¡Nada importante! Era de una empresa que ofrecía reductores de body,  jajaja. Se rio la Principessa, preguntándose : "¿Me conocerán estos badulaques? ¡Qué se creen, que me ofrecen este producto! Hummmm,

     También esa tarde, la Principessa se abocó a revisar ortográficamente unos escritos de un discípulo, quien se lo había pedido hacía tiempo pero recién ese día, llevó su material creativo.

    

   Nuevamente estuvo hasta tarde despierta, aunque el sueño la venció. Dejó un par de cosas para el día siguiente, esperando alcanzar a revisar todo.
    Cerró sus ojitos con la determinación de despertar a las 5, 30 hrs. para evitar sorpresas.  A esas alturas, Morfeo estaba roncando  hacía  un buen rato, pues se había aburrido de esperarla.

 

   Viernes 8 todo el día :  Estoy  bien pero.., ya se me va a pasar!!

 

   El celudes  (celular-despertador) no sonó a las 5,30 hs. como se le había instruido. Felizmente, el reloj biológico de la Princess sí funcionó ( ¿todavía funciona? ¡Siííiííí, jajaja) y logró levantarse a las 6. Los 15 minutos extras igual le sirvieron.
   Se preparó, rápidamente, un Cappuccino artesa. ¡Claro que fue demasiado rápido! Unos cuantos grumos flotaban sobre el líquido, a semejanza de embarcaciones a punto de hundirse, jaja. (¡estás perdiendo facultades, Principessa! ¡Cómo es posible un Cappuccino "grumiento", jajaja)  Parecía más bien Coffe cortado.

     A pesar de su café medio fracasado (pues igual se lo bebió todito, acompañado de una media luna), el sol salió temprano.  ¡Para todos, no sólo para ti, Principessa! ¡Es altamente democrático, populista si se quiere (el sol) ! Parece candidato, a todos promete un gran día.

    Ese día no hubo almuerzo para la Princess, sólo una taza de café con media marraqueta que era lo que le quedaba en la despensa. No alcanzaba a preparar nada y se había olvidado dejar descongelando lo que tenía.  En la noche, al llegar de Rengo, pasaría a comprar y saciaría el hambre. ¡Total, de inanición no se moriría! Tenía acumulación de energías y calorías (¡sobre todo de aquéllas!), así que, una vez que no almorzara no iba a ser letal.

    Esa tarde terminó el proceso de despedida y parabienes para el último de los tres grupos de trabajo con que finalizaba su labor esa semana. Momentos muy positivos, especialmente esa jornada, en que una alumna de Rengo, que en la segunda clase se mostró muy a la defensiva y hasta cierto punto agresiva ( no con la Princess, sino en sus planteamientos de vida frente al mundo), la abrazó un buen rato al despedirse  y agradeció haberla conocido. Ya en el primer recreo le había compartido cuáles eran sus aspiraciones profesionales, el por qué quería estudiar aquello (para ayudar a niños en situación de disfunción familiar como le habían ayudado a ella en su oportunidad). Me enterneció y recordó a  mi Infanta cuando compartió conmigo de sus planes de adoptar un/a niño/a, aunque tuviera hijos propios, con el fin de "devolverle la mano a la vida".  ¡Fue un hermoso momento para la Principessa, la vi emocionada! (¡Cuándo no!, jaja).

   

   Al llegar a Rancagua, no quiso pasar al Súper, aun sabiendo que carecía del vital alimento. Ordenó un poco las cosas del día sábado, se preparó un nuevo Cappuccino y subió a su aposento. Se acostó y estaba degustando en cama de su coffe, cuando perdió la noción de todo. ¡Se quedó zzzzetaaaa! Cuando despertó una hora después, aún sostenía en su mano el tazón con Capuccino hasta la mitad. ¡Jajajaja!  ¡No supo cómo no derramó su bebida!  Agradeció a su suerte, porque si no hubiera sido así, habría debido limpiar, cambiar sábanas , pijama y quizás qué más.... ¡Seguro , Morfeo algo tuvo que ver en aquello! "¡De algunos apuros que me saque este hombrecillo de vez en cuando!", exclamó la Principessa, quien, después de terminar de tomarse el Capuccino, procedió a acostarse como Dios manda. 

Sábado 9 : ¡¡¡Ufff !!!!, la  última patita

    Mientras viajaba a la Villa de Rengo, a cumplir con sus 6 últimas clases de la semana, la Principessa, a pesar de estos días  de cansancio (felizmente no de furia), pensó en la    próxima semana. Habría cambio de folio, reorganización del horario, con mejor distribución aunque ocupara más días. Se terminaban  las jornadas agotadoras de 12 horas (máximo 6 al día).   Aquello permitiría que la juventud y belleza de la Principessa no sufra exigencias mayores (jajaja) .  Así que, ¡bienvenidos los cambios!, que , en este caso, sabe que serán positivos. Junto con ello, conocerá a nuevos alumnos, que,  con la práctica  de un semestre que ya tiene en el trabajo, sin duda, será una experiencia más óptima de lo que ha sido a la fecha. . Ojalá ellos digan lo mismo, Principessa, jajaja

 

     Después de regresar de Rengo, esta vez sí pasó al Supermercado. Se aprovisionó de lo necesario, para preparar lo que deseaba con ansias : ¡carne!, resultando un delicioso almuerzo, que la tuvo hasta las 16 hrs. sentada a la mesa. Posteriormente, junto con sus tés frutales, se tendió en su sillón favorito (los té no se tendieron, aclaro, jajaja) y se dedicó a dormitar, leer , escuchar música, en fin, .... a descansar.    En esa difícil tarea estuvo todaaaaaa la tarde, hasta que llegó la hora de preparar su once y , luego, ir a acostarse. Esta vez, apagó la luz temprano.

    Su noche estuvo plagada de sueños, que fueron turnándose entre sí, sin peleas ni dificultades.

 

   Domingo 10 : Día del Niño ..... y de la Niña  (como decía mi Infanta)

 

     ¡De nuevo a la tarea! Esta vez con la tranquilidad de un horario mejor distribuido.

      Después de desayunar, adelantar algo del almuerzo de hoy y trabajar en  unos ppt para el día lunes, la Principessa se preparó para salir de palacio e ir a ver a su Infanta.  En tanto, en la Plaza de los Héroes se daba inicio a las actividades de celebración del Día del Niño.

     Allá en el Parque se encontró con un conocido-amigo que la acompañó mientras realizaba su visita semanal a la Infanta. Agradeció su compañía y su consideración, toda vez que  había estado buscando a la Infanta y no la había encontrado, pero al verla llegar decidió acompañarla. Muchas flores aún estaban en perfecto estado, pero se las cambió y arregló los floreros de la mejor manera, como en cada ocasión. Es su forma de decirle que sigue en su corazón, como siempre ...

      Al regresar, y antes de subir a palacio, pasó a mirar las actividades preparadas para los infantes rancagüinos. Lo que más se veía eran filas de padres e hijos, esperando subirse a los diversos juegos inflables instalados. Caritas pintadas había por doquier, mientras un carrito de Bomberos, ya tradicional en la plaza, recorría con su carga de niños, el Paseo Independencia. El programa se extendió hasta las 18 horas, de forma que tuvo música de fondo por horas la Princess.

   
 

     Al igual que la semana anterior, a la hora de cocinar, preparó comida suficiente para unos 3 días. La novedad en la cocina de la Principessa la constituyó el COCHAYUYO, como paso a explicarles a continuación.

 

  Menú del día Domingo y siguientes:

 

Entrada : Alcachofa con salsa tártara 

 Principal : Carne, con guiso de verduras y                  Tortilla  de Cochayuyo

                 Guiso de Cochayuyo

 

Ensaladas : Tomate y Caigua

 

Bajativo : Té de rosa mosqueta y frutilla

 

Semillas de Caigua

  Después de alimentarse opíparamente y de lavar la vajilla (no logró engullir ni media alcachofa ni probar el guiso cochayuyesco, los que, obviamente, serán el alimento de los días de mañana y siguientes), se tendió a tomar sus bajativos y a escribir el resumen semanal de sus actividades, esperando les guste a sus admiradores (jajaja) .

    Un rato más , tomará su once correspondiente y se preparará para una nueva semana, llena de novedades.

    ¡Qué el ánimo, la fuerza y la suerte te acompañen , Princess!!

     ¡¡Bonne fortune!!