"Cegados por el deseo..."

- ¡Mmmm! ¡Qué título más sugerente! Especial para una novela rosa o para un filme triple XXX, jajaja....¿o...es una experiencia personal?

- ¿Por qué no? Lero..lero..

- ¡Princess! ¡Usted ya no está para esos trotes, amiga mía? 

- Jajaja, ¿A qué "trotes" haces alusión, si puede saberse? 

- Este...emmm... ¡No te hagas la inocente! ¡Tú sabes a cuáles me refiero! 

- Jajaja, el que yo no sea una jovenzuela en todo el sentido de la palabra no significa que no tenga deseos...

- ¡Oh, qué desfachatez! ...

- ¡No! ¡Para nada! Tengo múltiples deseos...aún : deseos de superarme, de conocer otros lugares, de disfrutar de una vida sencilla y tranquila...

- Jajaja...¡Eskiusmi! Había pensado en "otros" deseos no tan santos...

- ¡Hummm!  Debería decirte lo mismo que le expresó Diego Velázquez, el pintor, a quien le censuraba una obra en que aparecía un desnudo : "el pecado no está en mi Venus, sino en los ojos de quien la mira" . Jajaja, el ser humano está lleno de deseos durante toda su vida, de diferente tipo, y son ellos precisamente los que van guiando o motivando sus acciones. El que esos deseos sean más o menos  convenientes, más o menos adecuados, depende de su entorno  y de lo que esté dispuesto a hacer cada persona para alcanzarlos. 

- Cierto es.... Oye, volviendo al principio...

- Es el título de una película, de la película por la que sacrifiqué mi buen dormir la otra noche...

- ¡Ajá! Ya me acuerdo que me lo comentaste y luego me olvidé preguntarte de qué se trataba... ¿Me puedes contar ahora? Prometo no hacer juicios anticipados, jajaja.

- Ok.

   "Cegados por el deseo"  es una película con famosos actores, lo que hace más atractivo el filme. Participan en él Julia Robert, Jude Law, Clive Owen.  El nombre de la otra actriz  protagónica, conocida como "Alice" en la historia, lo desconozco (Nathalie Portmann, dice la cartelera). Al final, es ella la única que se salva de la vorágine y vislumbra la luz y una vida con sentido. En todo caso, en todo el filme siempre aparece como la más auténtica. ¿Será por su juventud? Y si es así, ¿eso significa que mientras más años tenemos, menos auténticos somos? ...Preguntas  retóricas,  por el momento...

 Los personajes que encarnan las superestrellas mencionadas realmente dan asco y pena, y, sin embargo, seguramente, encarnan a más de uno de nosotros. Un hombre -Jude- que no ha logrado mucho en el ámbito profesional,  viviendo con Alice se empecina en "jotear" a Julia, casi delante de su pareja. Es caradura como él solo y, cuando más adelante, cuando se declara "enamorado" de Julia como que se le perdona un tanto su desvergüenza.   A Julia no le es indiferente Jude, pero no quiere ser la tercera en discordia. Conoce a Clive (me olvidé de los nombres de los personajes), un dermatólogo medio dado a tener encuentros cibernéticos con sexo incluido, ...y se casan. Pasa el tiempo y caen las hojas del calendario. Se reencuentran Julia con Jude en una Expo-fotos de ella (es fotógrafa). ...Algo raro pasa... y también pasa otro año. Un día, Clive regresa de un viaje y se encuentra a una esposa desganada, fome, que no quiere nada con él. La razón: llevaba un año engañándolo con el otro... Jajaja...orgullo y amor propio herido, gritos, violencia psicológica (como diría alguien, jajaja)...Ella se va de la casa...a vivir con el otro...quien también había tenido LA escenita con Alice cuando ésta  descubre que su amado amaba a Julia.   ....Pero allí no termina todo, ¡No, señores! Clive vuelve a su costumbre de visitar lugares no muy santos y en una de sus tantas visitas, se encuentra con Alice bailando en el caño. Jajaja. Y el orgullo de macho herido, actúa. Paga "por mirar" en privado. Pierde toda dignidad, la llena de dinero, aunque no consigue nada, llora (no hay nada más patético que un man llorando donde no debe por una woman que no quiere nada con él delante de otra woman)  y ella, a pesar de lo reprobable de su "trabajo" actúa en forma más digna que él. En fin... Llega la hora en que, finalmente, accede a darle el divorcio a Julia, pero...con una condición ... ¡qué manera de caer más bajo! ¿Adivinan cuál es la condición? ¿No? Es como la última voluntad del condenado, jajaja. Y ella, ...¡si es para no creerlo! ...como quien se cambia un par de medias, por no decir otra cosa, accede. ¡Claro, el fin justifica los medios! ¡Quién no ha sido maquiavelo en algún instante de su vida, ya sea en plena conciencia o a posteriori! Sin embargo, el inmaduro de Jude se da cuenta de lo sucedido y llora a lágrima viva...Otra hoja del calendario...Julia y Clive están juntos de nuevo, no hubo casamiento con Jude, éste está solo y no haya nada mejor que ir, desesperado,  hasta la consulta médica de su rival .... a llorar, jajaja... Clive se conduele y le da la dirección de Alice, pero antes de que se vaya le dice que se acostó con ella...jajaja

   Al final, Jude está solo, Julia está con su marido pero con una cara de pescado que no se la puede y la única que se salva y logra salir de ese círculo vicioso es Alice (que no se llamaba así realmente), que se ha ido a otra ciudad  y comienza una nueva vida...The End...

- Antes que me digas nada, debo decirte que no es una película extraordinaria, romántica hasta decir basta, no,  no... Lo que me pareció interesante fue el desarrollo de los personajes, llenos de recovecos, con nada claro, usando a las personas, pues no se atreven a vivir solos o consigo mismos... sin metas a largo plazo, como verdaderos náufragos, alimentándose de los que tienen más a mano o tomando posesión de aquellos...Personajes, sin duda, muy humanos...

- ¿Tú que habrías hecho, puesta en la disyuntiva de Julia, de cumplir con la última voluntad del "condenado", jajaja? 

- Fácil opinar desde fuera, no sé qué tan difícil puede ser desde dentro...siendo protagonista. Lo que sí puedo aportar es que hay mujeres para las cuales una acostada más o menos (con alguien distinto se supone) no es significativo en su vida, no les deja marcas y hasta son capaces de "echar tierra" sobre dichas experiencias. Lo mismo debe ocurrirle a muchos hombres. Pero también hay congéneres que no podrían estar con un hombre sin que les afecte, ya sea por integridad, por sus valores, por tabúes o por alguna otra razón. Y, a propósito del título de la película, tengo un deseo en estos momentos que debo poner en práctica con urgencia: ¡una duchaaaa! 

.....

   Después de una fresquísima ducha, volvió a la tarea. El celular marca 33 grados de temperatura hoy lunes en Santiago Centro, de manera que no durará mucho el efecto refrescante, pero algo es algo. En todo caso, ya sea en la capital del Reyno de Chile, como en Rancagua , el calor estival se está haciendo sentir. Ayer, en palacio, a pesar de lo fresco que es, hubo momentos en que no se podía estar en la terraza del calor que hacía y en la noche, debió dormir con la puerta-ventana abierta.  Acá en Santiago no puede dejar ventana abierta, el ruido de la calle no le permitiría dormir.... En fin, vamos a ver cómo se le presentará esta noite...

   Hoy llegó a las 11 a la gran ciudad. Antes de venirse al palacete debía hacer un trámite bancario. Tenía la dirección pero no recordaba dónde quedaba la calle exactamente. Se bajó en Estación U.de Chile, pero le erró el "palo al gato", jajaja. La calle Amunátegui queda a un costado de la Torre Entel, jajaja. Así que, guiada por Mapscity, pero con la mochila llena de vituallas a la espalda, llegó hasta el número 154. 

   Luego, a volver, caminando obviamente (debía recuperar el training) hasta llegar a la Estación Sta. Lucía. Allí se detuvo unos minutos para transformarse en espectadora de un Concierto Callejero de un excelente trío de cantantes, quienes interpretaron canciones de los Jaivas y Víctor Heredia. Una vez que hicieron un receso, se fue a vitrinear a la Feria Artesanal de ese lugar (que le encanta). Allí estuvo conversando con una locataria que conocía Isla de Pascua desde hacía bastante tiempo y muy bien. Se vio en apuros para responder consultas de visitas de determinados lugares, pues doña Principessa no logró memorizar todos los nombres. ¿Cómo llegó a esa conversación con una desconocida? Le sucedió que le faltaron recuerdos para ella misma y allí los encontró. Desde hace tiempo, cada vez que viaja a alguna parte, siempre compra llaveros y pequeños recuerdos. Esta vez se quedó "corta" con ella misma y como no podía volver a la isla (jajaja) lo subsanó de esa manera.

 

   Hasta ese momento, todo estaba resultando bien... Debe haberse levantado con la patita derecha, jajaja. Ya en el palacete, abrió cortinas y postigos, guardó vituallas, se dio una refrescante ducha (ya van tres en el día, capaz que se me adelgace la piel, como dice alguien, jajaja), bajó a comprar al súper Ekono y se dispuso a preparar un rico almuerzo. 

     Ya de sobremesa, continuó con su lectura, la que terminó pronto, para su sorpresa. Ya lleva 2.280 páginas leídas del Juego de Tronos y las historias de vidas han  ido avanzando pero aún  falta mucho. La guerra ha vivido su primera parte y,  al parecer, se acerca un enfrentamiento que pocos esperan y que, seguramente, cambiará el curso de la historia de los personajes. Está ansiosa por comenzar el cuarto tomo. 

    Ya son las 19 horas y el sol, por suerte, se está escondiendo tras los edificios. Es la hora deseada para que el palacete se refresque, aunque el celu sigue indicando 32 grados celsius. Así es el tiempo,  cuando no es el calor, es el frío. Lo ideal no existe, Principessa, o...no todos pueden darse el lujo de poseer el ideal... Así que, a ver el vaso, no, la botella (de agua Puyehue, helada) medio llena, en lugar de lo contrario. ¡Hasta la vista!