Sucede que llegó el día en que se me liberaban mis fondos y decidí pagar lo que restaba de dos viajes que haré el próximo año. Ustedes pensarán y para qué tan adelantado. No, ni tanto, pues de todas maneras uno debe tener pagado el total del tour 3 meses antes de viajar, así se evita que uno se arrepienta -supongo- a última hora y se queden con los boletos aéreos comprados. Así que no era tanto el adelanto. La gracia era conseguir un buen precio, es decir, un descuento por soltar los morlacos antes, 😉. Hice las gestiones correspondientes, vía wahtsapp, y no obtuve mi objetivo. ¡Perdieron!, me dije. ¡Allá ellos! ¡Más me dura la plata! 🙈 🙈. Entonces, con el rabo entre las piernas -como la vulpeja de la fábula- "cogí" literalmente mis milloncitos y procedí a invertirlos.
No pasaron ni un par de horas cuando me avisan que se había reactivado la oferta de pago total con descuentos. Obvio, eso salía más a cuenta que el interés que ganaban mis fondos en el depósito a plazo, pero mi nuevo banco no permitía, como el anterior, recuperar dinero invertido sino hasta la fecha exacta, sniff😢😭😭. "Piensa, Mónica, piensa". Al día siguiente partí a la sucursal más cercana (a un par de cuadras de palacio) a intentar recuperar mi platita.
La primera tarea fue averiguar quién era mi ejecutivo. ¡Albricias! ¡Estaba de vacaciones, 🤣! Expliqué la necesidad de recuperar el depósito -sacarle una mascada, más bien- y me enviaron al encargado de este rubro en el banco. Ahí estuve esperando que se desocupara por unos buenos minutos y la hora pasaba y no tenía ni una papa pelá, 😂. Cuando me atendió dije la pura y santa verdad, pero aquélla no servía a mi propósito. Ya ven; decir la verdad no siempre resulta. Había sólo 3 razones de fuerza mayor atendibles y la mía estaba a años luz de distancia. El funcionario, seguramente conmovido por mi transparencia, 😉-no de cuerpo precisamente, 🙈- decidió ayudarme dando como razón a su jefe que yo me había equivocado en digitar la cantidad. Obviamente, yo fui más convincente con aquella razón por mis antecedentes a la vista: tercera edad, problemas de visión y cierta confusión mental, 😂 😂. El papel de víctima y de veterana torpe -por no decir otra cosa, 😁- lo actué a la perfección. El trámite, que era posible completar en un plazo de 3 horas, estuvo finiquitado en media horita. Al día siguiente, tuve de nuevo disponibles mis millones, para, si quisiera, darme una zambullida a lo Rico Mac Pato, 😁 😁, antes de que me diera de cabeza en el fondo de la piscina.
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