martes, 30 de abril de 2024

Una noche en Ankara ...

    


     El día jueves llegamos a la capital del reino, ANKARA. Pero antes de hacerlo, pasamos a un lago blanco, blanco, llamado Tuz Gölü ('lago salado'), el segundo mayor lago de Turquía, ubicado en la Región de Anatolia Central, a 150 kms. de Ankara. Allí estaba planificada una parada técnica, de forma que en media hora aprovechamos, los que quisimos, de acercarnos al lago, internarnos un poco en sus aguas salobres y sacarse alguna fotografía. ¡Lo hice! Claro que me dolieron bastante las plantas de los pies pues la sal era una costra muy dura al contacto con la piel y con muy poca agua. Desde lejos parecía que uno caminaba sobre sus aguas, aunque estos tiempos no están para milagros. Sólo estuvimos unos pocos de nosotros, pues muchos se quedaron vitrineando en el supermercado de paso. Este salar llega a producir hasta un 70% de la sal que consume Turquía, lo que da cuenta de su importancia y extensión, amén de la industria asociada a su existencia. Es el hábitat de flamencos y otras aves, aunque en esta visita no divisamos a ninguno de ellos.    
   Llegamos a Ankara tarde. Cerca de las 21 horas. Bajé rápidamente a cenar y luego me acompañaron Susana, Patricia y Valeria. Terminada la cena, no muy variada que digamos (éste resultó el hotel con menos glamour, por así decirlo, 😂, del viaje), salimos a los alrededores, donde habíamos visto una hermosa construcción, que a esa hora de la noche estaba bellamente iluminada. Se veía imponente. Era la Mezquita Kocatepe, la más grande de la capital, con una ubicación que le permite ser vista de casi toda la ciudad. Fue construida entre 1967 a 1987. No habíamos salido preparadas para intentar el ingreso (con nuestros respectivos pañuelos para cubrirnos el cabello), así que no intentamos llegar hasta su puerta. Sólo la admiramos desde cerca. Luego me enteré que otras compañeras, más osadas, habían logrado entrar y conseguido pañuelos prestados. Moraleja: nunca hay que darse por vencida de antemano. 
   Regresamos al hotel. La noche estaba realmente grata y era joven -la noche, 😁-. Pasamos a la terraza a servirnos "algo". Las chiquillas pidieron unos tragos, los que llegaron en unas enormes copas. Yo no tenía ganas de alcohol así que me conformé con un  café☕️americano y la compañía.  Cerca había otro grupo, más numeroso, de compañeros de aventuras. A la hora de pagar, la gracia me salió cero peso -¡qué vergüenza!- , pues el té y el café eran gratis para los de Masaitravel, 😉. Las chiquillas me compartieron cosas de su trabajo y de su vidas, algo les conté yo también y luego de consumir cada cual lo suyo, nos fuimos a acostar. Todas estábamos algo  cansadas. 
   Ya en mi habitación (con un baño al estilo vintage, 😅, ¡una antigualla!), logré conectarme al wifi del piso en que me alojaba. Recibí los whatsapps pendientes y, entre ellos, Anita me preguntaba si estaba en mi habitación, pero aquella pregunta la había hecho 2 horas antes, 😂. De todas maneras le contesté y ella, rápidamente, retrucó señalando que iban al bar y me invitaban a bajar. ¡Qué  me dijeron a mí! Bajé  ipso facto, 😁 -¡otra vez, cliente frecuente!, jajaja-.Era aún temprano y en Ankara sólo estaríamos esa noche, entonces, debíamos aprovecharla. Estas "niñas" estaban al interior del bar. Eran Anita, Caro, Karla, más Angélica. Ellas recién habían pedido. Yo, insisto, no quería trago, así que me matriculé con un Ice tea. Estuvimos entretenidas conversando de nuestras vidas. De Angélica poco conocíamos (fue una de las enfermas más "graves", pero ya estaba mejor), así que algo nos interiorizamos de su life. A la hora de pagar, casi me caigo de traste por el valor de los tragos (perdón 🙏 por la vulgaridad, pero es que en estos países musulmanes y también en los budistas, el alcohol tiene la categoría de objeto de lujo, ¡no es justo, 😂 😂!). El mío no era caro, pues no contenía alcohol (apenas 70 piticlines turcos, es decir, 2.300 pesos), pero los de mis amigas oscilaban entre 10 a 15 lucrecias, 🧐😳😲, un solo trago. Una noche de farra en Turquía, Tailandia, Egipto, Jordania y seguramente varios otros países musulmanes y budistas sale recontra caro, 😪🥴... Suerte para mis amigas que ya cerraban el local, así no tendrían que quedar en bancarrota. Eran las 23,30 y nos avisaron que cerraban el bar, 😂.¡Nos estaban echando! No nos quedó otra cosa que pagar e irnos. Pero antes estuvimos un buen rato sacando cuentas y ajustando lo que debía pagar cada una, 🙈, mientras el garzón esperaba estoicamente, con cara de desesperado, 🤣😂😆. ¡Calabaza, calabaza! 

   Llegué  a mi habitación  a tomarme un Coffee (Nescafé), a arreglar mis cosas para dormir sin mucho "atao" pues sólo habíamos  bajado la mochila con lo básico  y necesario para una noche loca, 😂, y me puse al día con algún video y noticia. Era aún jueves por la noche.   

 ¡Viernes 26! Bonito día en Ankara, la capital. Nuestra única y gran visita: el Mausoleo (Anitkabir) de Atatürk, el Padre de la República Turca, de quien habíamos visto retratos por todos los lugares visitados. Había llegado la hora de conocer acerca de su vida, obra y legado. Mustafa Kemal Atatürk (1881 en Grecia - 1938 en Turquía) fue el líder de la Guerra de la Independencia Turca (de Inglaterra) y el fundador y primer Presidente de la República de Turquía. Fue quien de Ankara la capital desde 1923 y permitió que se transformará en la gran urbe que es hoy. Antes era Estambul el centro del Imperio Otomano.    
   Atatürk, antes de ser el héroe nacional que es, fraguó su fama y destreza en la I Guerra Mundial, luchando, eso sí, en el bando perdedor. Luego, contra el ejército griego, saliendo vencedor de aquella contienda de años. Ahora entiendo el por qué de los "dires y diretes" (como dicen "nuestros" políticos) entre Turquía y Grecia de vez en cuando. Luego de la derrota en la I G.M. el Sultán a cargo entregó Turquía al dominio británico, lo que Atatürk no aceptó y luchó por la Independencia, con el éxito mencionado. De allí el culto y admiración que se le tiene a su figura. No sólo hizo de Turquía una nación autónoma, sino que le otorgó una nueva forma de gobierno, con un giro radical respecto a lo anterior. Eliminó la figura del Sultán (👏), secularizó el país, impuso la República Parlamentaria, estableció elecciones populares, las mujeres tuvieron derecho a voto y, a partir de 1935, pudieron ser candidatas, cambió el alfabeto árabe al latino, las unidades de medida se ajustaron a los demás países, es decir, occidentalizó la nación, dándole una nueva constitución y un carácter reformador. Hay otras dos leyes curiosas que se abolieron, según nos contó Çigdem, la informadísima guía local: la Ley del Sombrero (los turcos anteriormente usaban un sombrero distinto según su categoría e importancia, lo que implicaba una gran discriminación desde la primera vista) y la Ley de la Poligamia (antes podían tener 4 esposas,  ahora , sólo 1).    
   Sobre la base lo anterior, se entiende esta enorme infraestructura en homenaje a Atatürk (nombre honorífico dado a Mustafa Kemal, que significa 'Padre de los turcos'). Su construcción comenzó el 1944 y duró 9 años. Se ubica en la colina Rasateppe, desde la cual se puede observar la ciudad. Está compuesto de dos partes: el Parque de la Paz y el bloque monumental.  El Parque rodea toda la construcción sólida, mientras el bloque monumental está constituido por el Camino de los Leones, precedido por unas enormes de estatuas que representan a los habitantes de la nación condolidos por la muerte del héroe, seguido por un largo (262 metros) y amplio trayecto con 24 leones hititas (sentados a los lados, representando el poder y la tranquilidad)la Plaza Ceremonial, que puede albergar a 15.000 personas. El Mausoleo, propiamente tal, de estilo clásico, se ubica a la izquierda, luego de una escalera monumental. En el exterior, en ambos costados y en altura, se pueden observar 4 guardias por lado, cada uno de los cuales representa una rama de las fuerzas armadas de Turquía. Al fondo del Salón de Honor del Mausoleo, ya al interior, se puede observar la tumba de Atatürk, bajo una losa de mármol. Todo es monumental.  
   A los lados del Mausoleo se encuentra un Museo con pinturas, objetos del héroe y grandes maquetas que recrean escenas de guerra. Un grupo de nosotras ingresamos al filo de la hora de la hora del encuentro con el grupo. Nos atrasamos porque en el momento que íbamos a ingresar al Mausoleo, comenzó el cambio de guardia  y a todos se nos expulsó del lugar a "grito pelao", 😂. Difícil tarea la de aquellos guardias, que debían hacerse obedecer por cientos de turistas porfiados y con idiomas diferentes. Con el Himno Nacional y el cambio de guardia todo se detiene en el sector. Sólo resta mirar y actuar con respeto.  

    Terminada esta visita, abandonamos la capital turca, almorzamos en la ruta (ya ni me acuerdo dónde) y en 6 horas más estábamos llegando nuevamente a ESTAMBUL. Aún no oscurecía, la tarde estaba muy grata. Se nos dejó al comienzo de una avenida concurridísima, con mucha gente y comercio, más el paso de un tranvía,  para que recorriéramos a nuestro aire. Debíamos llegar a la conocida Torre Gálata, en una hora y un poco más. Fue un paseo entretenido y multicolor. Pasamos a varios locales, compramos una que otra cosilla y llegamos a tiempo al lugar señalado. La tarde había caído, se había levantado una brisa helada y algunas compañeras (porque eran mujeres) no llegaban. Nuestra paciencia ya se terminaba. Finalmente, nos fuimos cuando llegaron las "crespas", que si bien no eran las únicas que faltaban, con ellas 4 ya no eran tanto las pérdidas, 😂 😂. Dos no llegaron. Nos preocupamos especialmente por María, de Rengo, una lola de 80 primaveras, muy vivaracha ella, pero que ese día no andaba muy bien de salud. Cuando ya íbamos en el bus rumbo al hotel nos avisaron que las habían hallado, 🙈, sin ningún daño visible ni invisible, 😂.  
   Antes de finalizar el día y el relato, me interesa comentarles que la Torre Gálata es una torre de defensa, que data del siglo XIV (1348). Fue llamada "Torre de Cristo" por los genoveses y "Gran Torre" por los bizantinos. Es de origen medieval, de material de piedra y de estilo románico. Mide 67 metros de altura y es de gran visibilidad desde la distancia. Fue también cárcel, Torre de vigilancia para Bomberos y ahora es un Museo Mirador. 

   Hasta aquí, el día viernes comenzado en Ankara y terminado en Estambul. Ya queda menos del viaje, sólo  dos días que ya son pretérito. ¿Cómo pasaron, qué hicimos, a quiénes conocimos? Ya les contaré.  Hasta prontooo. 


  

jueves, 25 de abril de 2024

CAPADOCCIA, un destino maravilloso...

 



 
   El trayecto hasta llegar a CAPADOCCIA fue largooo y cansador. Era uno de nuestros destinos más esperados. Eso nos dio la fuerza y paciencia para soportar varias horas de viaje, 😂. Eran 614 kms., con paradas técnicas obligatorias. En una de esas paradas almorzamos, abundantemente, de manera que el siguiente tramo del viaje nos sirvió de siesta a la mayoría.  Yo y mi compañera, María, casi nos turnábamos en la tarea, aunque también hubo ratos de conversación. Tema existía de sobra pues nuestras infancias rurales habían tenido puntos en común. A eso de las 17,45 hicimos una detención muy interesante.    
   Habíamos llegado a un lugar llamado Sultanhani, donde nos encontramos con un tesoro patrimonial: Karvan Saray, un "hotel" del siglo XIII. Eran construcciones de concreto, con una sola puerta de entrada, con altas murallas, en cuyo interior tenían patios y dependencias para alojar a los comerciantes que iban con sus productos para o desde la Ruta de la Seda. Estas verdaderas fortalezas se utilizaban al mismo tiempo de Mercado, pues los comerciantes que llegaban hasta aquí negociaban sus productos y se iban con los que les interesaban. Eran lugares de paso, gratuitos, cuyo objetivo era preservar de los bandidos la Ruta. Hoy día ese lugar está transformado en un Museo, que conserva alfombras, grabados y otros objetos propios de la actividad. Fue una visita que me encantó, pues si bien sabía de la existencia de estos "edificios", nunca había visto uno. Nunca pensé tener la oportunidad de conocer alguno, tan bien conservado y ya con más de 800 años.  
    Durante el trayecto, Çigdem, la guía turca, nos fue explicando lo que íbamos viendo a nuestro paso. Nos habló de la amplia producción de frutas, verduras y cereales de Turquía, que prácticamente cubre todo el espectro. Eso sí, nos aclaró, que no producían paltas  😁 😁.  Son productores destacados de avellanas, almendras, nueces, dátiles, pistachos, higos, castañas, granadas, naranjas, limones, tomates, sandías, melones, manzanas, etc.etc. A ambos orillas de carretera los verdes campos parecían a ratos, una gran tela verde, hecha de retazos. En otros momentos, distintos árboles frutales y campos de vides reemplazaban las llanas superficies verdes. A ello, hay que agregar que en el ámbito de la industrialización, Turquía fabrica automóviles, acción que se concentra en la provincia de Bursa, por la que pasamos esa tarde. Desde la carretera igualmente pudimos apreciar el significativo tamaño de la urbe, pues no ingresamos a ella. Turquía,  además,  cuenta con uno de los astilleros más grandes de Europa.  
    Llegamos de noche a Capadoccia. La luna, enorme, se asomó de entre las nubes justo por el lado que iba yo en el bus y adelantó parte de la maravilla que veríamos a continuación al comenzar el descenso en curva. Un ¡Ohhh! se escapó espontáneamente de nuestros labios al ver las estructuras cónicas iluminadas por fuera y dentro, dejando escapar la luz de sus pequeñas ventanas. Toda la extraña y mágica ciudad era una explosión de luz de la que queríamos dejar constancia casi como desesperados en nuestros celulares. Ya nos habían anunciado y explicado que no pernoctaríamos en un hotel tradicional, sino en uno construido en las mismas rocas y piedras de las de esta ciudad de hadas milenarias. 
     El bus nos dejó en un sector plano de la ciudad. Desde allí caminamos unas cuadras, las últimas en una subida trabajosa, que nos hizo llegar acesantes hasta el hotel. La calle de adoquines complotaba contra nosotros. Fue un detalle importante que no tuviéramos que llevar nuestras maletas. Personal encargado del hotel las iría a buscar al mismo lugar donde llegó el bus. Asimismo, éstas  (las maletas) serían llevadas hasta nuestra habitación. Cuando vimos la estructura del hotel, con sus habitaciones cavadas en la roca y las escaleras por  uno y otro lado como las casas de los Pitufos, entendimos por qué no podríamos llegar con el equipaje sano y salvo al piso correspondiente.  
   Mi habitación,  en un piso 1 que quedaba después de subir una escalera y media,  resultó ser espectacular. Efectivamente todas las paredes eran de piedra, incluso un largo sillón en el dormitorio que salía de la misma roca. Además contaba con dos ventanas, lo que era todo un privilegio si se considera que varias no tenían ventana. Una rápida ducha y me fui a cenar. Llegué la última,😂😂😂, así que me debí conformar con sentarme en el único espacio disponible, es decir, al lado de las más afectadas por el resfrío. ¡Una lata, pues yo ya estaba saliendo de mi resfrío,  gracias al jarabe comprado. 

    [Entre paréntesis: esto de los resfríos generalizados pudo contenerse un poco si las guías hubieran actuado preventivamente. Pero no quisieron hacerlo, aunque varios les pedimos que sugirieran el uso de mascarillas. Asimismo, considerando que cada uno de nosotros tenia asociado un seguro de salud con el viaje, aprovechando aquello debieron gestionar éste para la compañera más afectada en primera instancia y de esa manera la situación no se habría extendido ni complicado tanto. Hubo unas 6 mujeres y unos 3 hombres muy afectados, lo que no significa que los demás no nos hallamos enfermado. Creo que al menos un 80% ha sufrido contagio. Algunos, más jóvenes, más fuertes y/o más cuidadosos pudieron salir indemnes del problema...hasta ahora, 🤭. Cierro paréntesis].   

   La primera cena en Artemis Cave Suite fue abundante y acompañada de una cerveza o una buena copa de vino, gentileza  de Masaitravel, ¡bravo!👏👏🍷🍻. Estuvo rica, pero fue mucha. Además, ya eran más de las 21 horas. En todo caso, sobrevivimos de aquel esfuerzo. Terminada la cena,  después de tan largo viaje, todos nos dispusimos a retirarnos a nuestros aposentos. Yo, igual que todos ...o casi todos. De pronto escuché mi bello nombre. El grupo de dos hermanas y una hija, Susana, Patricia y Valeria (de Peñalolén) me llamaban para que las acompañara a servirse una copa en la terraza, que quedaba a unos cuantos escalones más arriba de la terraza del comedor. Las acompañé. Ellas me habían parecido simpáticas y sencillas, luego de haber coincidido en la misma mesa en más de algún desayuno o cena anterior. 

  [Otro paréntesis: es importante que no me olvide de señalar algo relevante. Este ha sido el grupo más integrado con el que me ha tocado compartir viaje y eso que somos 40 viajeros. Yo he compartido con varias personas distintas, sin hacerme partner permanente de nadie. He conversado con la mayoría de las personas. Y me he sentido acogida y sin problemas de socialización. Sólo hay algunas personas con las que no me he comunicado prácticamente  casi para nada. Hay por ejemplo, una Sra.de sus años con dos hijas y una sobrina o nuera también de sus años. Son todas altas, crespas y rubias. Se nota gente de plata, por la cantidad de compras que hacen en cada ocasión. Hace un par de días enteré que eran turcas, adineradas y del sector de la Araucanía. Dos veces he quedado cerca, en la misma mesa, porque no había otro lugar dónde sentarme, pero sólo conversaban entre ellas y otra madre y su hija rubia y modelo, al parecer. Y lo peor es que conversan en tono alto, de manera que no permiten que la gente "no pudiente"" converse entre ella, 😁 🤣.  Como es "gente linda" los feos debemos quedarnos callados, 😂 😂. Hay otro matrimonio con dos hijas (bien creciditas) que recién han empezado a saludar y compartir con más gente.  Cierro nuevamente paréntesis].

   Esa primera noche en Capadoccia fue muy grata y conversada.  Estuvimos acompañadas del ritmo de reaggetton. Consumimos una cerveza 🍺 😋 local cada una y luego nos dirigimos a nuestros respectivos aposentos. A esa hora ya nos habíamos enterado  que NO íbamos a volar en Globo Aerostático a la mañana siguiente. La Dirección  de Aeronáutica no autorizaba el vuelo de globos para el miércoles porque la situación meteorológica no era apta o segura. Tendríamos que esperar que el jueves tuviéramos más suerte antes de partir.    

   Al día siguiente, luego de un desayuno sin apuros, abandonamos el hotel en dirección al Valle de los Pitufos, perdón, al Valle de los Monjes, lugar único y natural, producto del "trabajo" de los fenómenos  y desastres naturales durante millones de años sobre la toba o roca volcánica y/o ceniza endurecida. El viento, la lluvia, la erosión, las erupciones volcánicas, los terremotos dejaron la huella en esta superficie y material, produciendo el paisaje casi extraterrestre o de cuento existente en el lugar, con sus cónicas figuras llamadas "chimeneas de hadas". Fue el lugar ideal encontrado por distintos cristianos y eremitas hace cientos de años que, escapando de las persecuciones se refugiaron aquí, excavando las rocas, formando lugares para vivir y orar. Los monjes habitaron este valle, construyendo sus "viviendas", "monasterios" y "capillas", que adornaron al interior con figuras geométricas de colores básicos obtenidos con productos naturales, de los cuales aún hay muestras suficientes en varias construcciones.    
   Durante el siglo XI y XII, el Imperio Bizantino mandó artistas a los monasterios y capillas. Las figuras y escenas bíblicas cobraron vida al interior de las construcciones  religiosas, las que aún se conservan, manteniendo su vívido colorido. San Basilio fue el monje creador de la vida monástica en este sector y si bien su tumba está en Estambul, hay una Capilla o Iglesia con su nombre. En ella y en un par de monasterios ingresamos, así como en dependencias en que la vida doméstica de estos mismos habitantes se llevaba a cabo: cocinas y bodegas.  No resulta fácil acceder a cada construcción, tanto por la cantidad de visitantes, como por la precariedad y estrechez de las construcciones.  En las de carácter religioso está prohibido sacar fotografías para preservar las hermosas pinturas, pero en aquellas dependencias de la vida doméstica de los monjes, sí puede fotografiarse. Las viviendas y monasterios están dispuestos en distintos niveles, según el relieve del terreno, lo que hace de su recorrido y visita una actividad muy especial. Los monjes habitaron el valle hasta los años 1923  a 1924. 
     Partimos de este lugar para ir a un Mirador donde se observaba el llamado Valle del Amor, llamado así no precisamente por contener figuras románticas, 😂 😂. Como un plus para los visitantes, había aquí unos camellos que, por unos 10 o más euros, según los minutos, podían ser montados, mientras sus jinetes eran fotografiados con el fin de agregar un recuerdo físico de la experiencia, recuerdo que tenía, obviamente, un costo adicional, 🤑🤑. Pronto llegó la hora de almorzar, lo que hicimos en un restaurante cercano, para continuar en la tarde con un par de actividades más. Primero fue la caminata por el Valle de las Chimeneas de las Hadas (Pasabag). Hacía bastante calor, así que íbamos buscando la sombra para descansar, mientras tratábamos de descubrir figuras en las "cabezas" o "sombreros" de las Chimeneas.  Una monja, una iguana, que desde otra perspectiva se transformaba en conejo, un búho, pero el que sin duda era el más popular se llamaba "Cabezón". Era un "espárrago  - 😂- con "cuello" delgado y cabeza grande. Fotos, fotos y más fotos, más alguna performance de uno o varios viajeros. Bonito recorrido, en el terreno mismo de las Hadas pero que casi nos noquea por el calor existente. 

    La Exposición de Joyas fue la última visita planificada. Nos llevaron a un local de numerosas joyas con distintas piedras preciosas y semipreciosas, que pudimos observar en detalle, luego de unos minutos de blablablá de una mejicana avecindada en Turquía. Más de algún viajero salió con su "regalito", aunque a la mayoría le acomodaba pertenecer a la familia Miranda, 😂.  Los valores no eran para nada económicos. De allí salimos para cruzar la calle y desde un Mirador observar el valle y el sector "Uchisar", el más antiguo de la ciudad. La vista panorámica era hermosa.    

    Pasadas las 17 horas regresamos a nuestro alojamiento, haciendo a pie quienes quisiéramos el último tramo del recorrido hasta el hotel. Yo me decidí a caminar porque mi objetivo era irme vitrineando. Iba muy concentrada en mi papel de turista consumidora de souvenirs cuando escucho mi nombre y veo a mis compañeras de la noche anterior, que estaban sentadas a una mesa en un local abierto, contiguo a la vereda. Hacía calor por lo que no podía desoír el llamado a compartir una cerveza helada. Estábamos en tan esforzada tarea cuando vimos pasar a un trío, Caro, Karla y Anita, las que se unieron al esfuerzo conjunto, 😂 🍺 🍻. ¡Salud! Entre conversa y conversa, análisis de la realidad nacional y varios, avanzó la hora y se nos terminó la 🍺.Ya era hora de  enfilar nuestros pasos al alojamiento, con el tiempo suficiente para darnos un reponedor baño y luego compartir la cena, que estuvo más cercana a nuestros gustos, pues consistió en una hamburguesa (de carne, pollo o falafel, según elección), con papas fritas, acompañada de vino o cerveza. ¡Mmmm!😋🤗🤗. Todo estaba rico, pero... no tuvimos las buenas noticias que esperábamos. ¡NO HABRÍA VUELO en GLOBO AEROSTÁTICO! 😭😭😭😭🪂🪂, ni en paracaídas ni nada. ¡NO HABÍA AUTORIZACION PARA VOLAR! 😬🥴🥺😫. No nos quedó otra que autoconvencernos de que por algo sería, 😂, que ya estábamos pagadas con lo visto, etcetc. En mi caso, tenía felizmente la experiencia de haber volado en Luxor  el año 2019, pero no puedo negar que había soñado despierta con volar sobre Capadoccia. #$%&%£¡Plop! En todo caso, la empresa nos había avisado desde el comienzo que esta actividad, que además era optativa, no tenía el 100% de seguridad de llevarse a cabo, pues dependía del clima y de los permisos correspondientes.Tengo entendido que en este lugar, Göreme, en la Región de Capadoccia, es el lugar donde más globos aerostáticos vuelan al mismo tiempo, 165. ¡Qué maravilla!  ¡Y qué frustración no poder hacerlo después de habr llegado acá,  que no es fácil ni barato!😭😭😭

   Con Caro, Karla y Anita nos pasamos a quedar a un rincón al aire libre, que estaba implementado con cojines. Conversamos un rato, hicimos terapia grupal, 😂, y luego nos fuimos a acostar. A la mañana siguiente, antes de desayunar, debíamos dejar las maletas fuera de la habitación  para que éstas  sean bajadas al plano por los encargados.  

   No todo lo de Capadoccia terminó en esto. En la mañana, luego de recorrer algunos kilómetros antes de salir de la región con destino a la capital de Turquía, ANKARA, pasamos a conocer y a recorrer otra maravilla y sorpresa: "una Ciudad Subterránea", de las 37 descubiertas, existentes desde tiempos de los Hititas y posteriores, 😲😳🙃🤗. El lugar donde nos detuvimos se llamaba Derinkuyu. Fue una experiencia casi extrema, jajaja. Era una ciudad de 8 niveles, de 50 m. de profundidad, implementada con ductos de ventilación y espacios para almacenamiento de alimentos, túneles estrechos y por varios de los cuales había que caminar agachados, escaleras muy angostas y hasta una Capilla en forma de cruz al fondo de la "ciudad". Esta construcción  subterránea en específico tenía capacidad para 10 mil personas. Se utilizaba como refugio ante catástrofes o defensa ante ataques enemigos. Se construían bajo los asentamientos de superficie, de manera que se podía buscar protección con rapidez. 

   No todos pudieron participar de esta actividad ni todos quisieron hacerlo. Unos por problemas de movilidad, otros porque no se sentían bien de salud, algunos por claustrofobia. No obstante, no éramos los únicos aventureros. Vimos chinos, indios e italianos. Había que turnarse para continuar el recorrido en ciertos tramos. Fue una interesante experiencia, de la que tampoco tenía noticia ni información.  

   El viaje continuó hasta la parada de almuerzo y luego, ya siendo más de las 18 horas, entramos a la capital de Turquía, con grandes y modernos edificios, con 6 millones de habitantes, que se notaban en el tráfico. Sólo  estaríamos  una  noche  en la ciudad,  para volver el sábado a Estambul.  Ya iniciábamos el regreso a casa. Se terminaba la aventura, 😒. Hasta pronto. 









martes, 23 de abril de 2024

En la piscina de Cleopatra...

  

   El domingo 21 fue un día realmente redondo, metafóricamente  hablando. Además de contar con la compañía de Claudio Iturra, llegamos a PAMUKKALE a un hotel 5 estrellas maravilloso, que sólo había visto en alguna imagen vip o de película hollywoodense. Las habitaciones más "rascas",😆, cuestan 440 dólares la noche. Tiene una infraestructura fantástica: piscina exterior, piscina termal, comedores en distintos pisos y una oferta gastronómica de miedo. Frente a tanta belleza tomé la decisión,  a pesar de no haber curado aún mi resfrío, hacer uso de algunas de estas "gracias".

  Ya ha pasado el día y la decisión tomada no la puse en práctica. Habría andado a la carrera y me habría perdido la oportunidad de completar 16.100 pasos, equivalente a casi 11 kms., un récord en estos días. La intrahistoria de mi vida sucedió así, Cleopatra mediante,  jajaja 😂. Les cuento. 

    Amanecí temprano el lunes 22, aunque la hora de encuentro era a las 9,30, que se transformó en '45 porque una llegó tarde (ya lo había hecho antes). Comencé temprano a funcionar para escribir -5 a.m.- pues la noche anterior Morfeo me había vencido. Lo importante es que el trabajo matinal resultó y terminó en el tiempo exacto (recuerdo que cuando ejercía como docente de aula, actuaba de la misma manera, pues terminaba rendida al final del día y la necesaria corrección de pruebas tenía más éxito y rapidez luego de haber dormido unas horas). Volvamos al presente: después de haber disfrutado de un desayuno similar a los anteriores, pero con una oferta de bufette increíble (que daban ganas de descontrolarse sin culpa), nos fuimos al sector que da el nombre a esta ciudad: a las "Colinas de algodón", metafóricamente  hablando, porque el "algodón" en realidad es una sustancia calcárea de calcio, carbonato y otra serie de minerales, que con el tiempo (miles de años) y los terremotos, dejaron en la colina una maravilla natural transformada en piscinas con aguas termales de color blanco, ubicadas en forma de gradiente en el lugar. Es una imagen que deja sin habla al observarla personalmente, aunque uno la haya visto en fotografías y videos con anterioridad.  
    El bus nos dejó a unas dos cuadras del lugar, pero como si quisieran jugar con nuestra paciencia no nos llevaron de inmediato  hacia allá.  Sucede que en el mismo lugar, en la meseta y en las colinas siguientes, se había ubicado, hace cientos de años, HIERÁPOLIS, una antigua ciudad helenística y romana, hoy en ruinas, ubicada en la actual Pamukkale, provincia de Denizli, Turquía. Es Patrimonio de la Humanidad. Su nombre significa 'ciudad sagrada'. Existía ya antes de los griegos, en tiempos en que este lugar era parte de Frigia, cuyo rey más famoso cuyo nombre llega hasta nuestros días fue Midas, aquel que tenía el "toque del oro". La ciudad fue fundada originalmente alrededor del siglo VI a.C., aunque en esto hay versiones encontradas. Algunos hablan de la instalación de un templo en una colina inicialmente y que, posteriormente, se fueron construyendo los demás edificios. Lo que es indiscutible es que en este lugar estuvieron los persas, los griegos (el nombre de la ciudad antigua es de ese origen), que dependió del reino de Pérgamo, el que a la llegada de los Romanos, entregó la ciudad y los alrededores. Es así como, sobre la base de lo ya construido, los romanos ordenaron y completaron la infraestructura, levantando edificios de acuerdo a sus creencias y modo de vida. 
   Por tanto, en el sitio arqueológico de Hierápolis,, encontramos ruinas de templos, como el de Apolo, por ejemplo, del cual se conserva en pie unas columnas, un teatro para 15 mil espectadores sobre una colina (maravillosamente mantenido), una fuente monumental; el Plutonio, lugar precedido por una escultura monumental de Plutón o Hades, el dios de los Infiernos (una puerta que permite la entrada al Inframundo, que lleva a una cueva en que abundan gases tóxicos, que los sacerdotes seguidores del dios utilizaron como parte de su performance), monumentales Puertas de entrada a la ciudad, una enorme Necrópolis (transformada en la actualidad en Museo, donde se conservan miles de piezas de la época, entre ellos, sarcófagos, teselas, esculturas o restos de ellos, partes de columnas, etc.), una Basílica, Baños Romanos, entre otros. También en esta ciudad, en una colina más alta, se observa la tumba mausoleo del apóstol Felipe, quien murió producto del martirio.  
   La verdad es que hay mucho más que decir de este maravilloso sitio, como, por ejemplo, que fue asolada por terremotos en diferentes momentos, lo que contribuyó no sólo a la destrucción y abandono de la ciudad tempranamente, sino que permitió el afloramiento de fuentes termales riquísimas en minerales, que transformaron a la ciudad en un centro curativo desde a.C. Mucha gente venía a buscar sanación y tratamiento para sus males corporales. Se dice que incluso la reina egipcia, Cleopatra, se bañó en una piscina ubicada más al interior de donde se ubican los travertinos (piedra calcárea que desde lejos parece algodón o nieve), cuyas aguas mantienen una temperatura constante de 36 grados. La "Piscina de Cleopatra" tiene en el fondo restos de columnas de la ciudad, lo que es prueba fehaciente de los movimientos telúricos que una y otra vez asolaron la zona.    
    En nuestro primer recorrido por Hierápolis,  subimos hasta el Teatro grecorromano. ¡Sencillamente maravilloso! Allí estuvimos un rato imaginándonos cuántas festividades se habrían celebrado en aquel escenario, cuántas espectadores entusiastas habrían repletado los asientos de la construcción.  Al salir y comenzar a bajar la colina por el otro lado, se observa a la distancia la estructura de la Tumba-Mausoleo del apóstol Felipe, en una segunda colina más alta. Bajamos y pasamos cerca del Plutonio  y a un costado de un Ninfeo (fuente) monumental. Los acueductos que proveían el agua para esta maravilla se observa en el suelo. Llegamos hasta la Piscina de doña Cleo, para que sepamos dónde  se ubica, y aprovechamos de visitar los baños (actuales, no los romanos, 😂). Un rato allí y nos dirigimos caminando una cuadra o poco más hasta la zona llamada Cascadas de agua, piscinas de travertino, etc. Pasamos al lado del Museo, ex Necrópolis de la ciudad.  
   Al llegar a la zona blanca, las instrucciones  son claras: dejar las mochilas  y el calzado sobre unas mesas de picnic, donde serán resguardadas por los guías. Nos descalzamos y nos dirigimos a las Cascadas y/o piscinas. La superficie es rugosa mayoritariamente, ¡por suerte!, pero hay algunos sectores resbalosos, así que extremamos  las precauciones. El agua está caliente pero completamente soportable (es h2o termal). ¡Fotos, fotos, fotos! Caminamos atreviéndonos de ir de piscina en piscina. Cada cual, se agrupa y avanza con quien o quienes quiere. Me junto con Carolina y Karla (Caro y Karlita para los amigos, 😊 ).  Las fotografío ,me fotografían. Las últimas que me tomo son sentada sobre el travertino. Obvio, quedo con el jeans mojado (además de en las rodillas) y de color blanco, 😂 . Me salgo del lugar, recupero mis zapatillas y mochila y me dispongo a recorrer el sector, buscando otros espacios de Hierápolis no recorridos en grupo y con la guía. Dispongo de una hora para aquello. Camino alrededor de la colina blanca que es inmensa. Allí compruebo que, lamentablemente, las piscinas de aguas termales se están secando, típico  de la acción depredadora del turismo.  Me dirijo a la Entrada Monumental  de la antigua Ciudad Sagrada. Hay ruinas, de las que distingo algunas tumbas, una Basílica, las Puertas, la ancha y larga calle de entrada a la ciudad antigua, con construcciones a los largo de ella. He caminado unos 800 metros y el tiempo se me acaba. Debo regresar al punto de encuentro. 

   Lo siento, pero no me bañé en la Piscina de la Cleo. Preferí recorrer el sitio arqueológico en el tiempo que nos asignaron. Además, aquello era con pago personal, 😂. ¡Mano de guagua!, pensarán algunos, pero no. Me "chiflan" las ruinas y más si son romanas, 😊😇. Cuando llegué allá, debí proceder, de manera ímproba, a la tarea de bajarme el jeans aremangado hasta las rodillas. Había revertido todo el sector de una manera muy "elegante", 😂. Casi debí "entrar a picar". A tirones me saqué el pantalón, lo limpié un poco  (seguía blanquecino con la cal) y me los volví a embutir, 😂.  ¡Uff! Muchos se han visto en peores situaciones, 🙈, 

  Regresamos al hotel maravilloso, almorzamos como princesas y luego salimos con Alicia y Nancy a recorrer  la ciudad de Pumakkale, cuyo centro estaba a dos cuadras del hotel. Había un extenso Mercado, de pueblo pequeño, que nos asombró con sus precios en productos de algodón de la zona (toallas de diferente tamaño, pisapiés vestidos, blusas, etcetc.) Unos pisapiés y unas salidas ducha de excelente calidad, 100% algodón, valían 70 liras (2 lucas y fracción). Sin embargo, nuestras maletas, ya bastante cargadas, no permitían compras de mayor calibre. Una pena, 😭😭, realmente. Caminamos y caminamos.  

  Nos separamos de Alicia, a la que se ocurrió comer unas tortillas delgadísimas que preparaban en la calle, fuera de un café.  Nosotras no queríamos comer nada. Nos fuimos en búsqueda de un supermercado, que estaba más lejos de lo que habíamos pensado y además  lleno de chinos. Escapamos de allí y pasamos al local de ropa  de un turco muy sus géneris para su publicidad. Cuando íbamos al súper, desde la vereda del frente nos gritó "¡Viva Chile, m...! ¡Upps!, gran sorpresa gran. El misterio era cómo nos había reconocido. No llevábamos las mochilas. Nancy llevaba su gorro de Masaitravel, yo no. Tal vez fue aquello. La cosa es que al regreso, además de ostras, había otras compañeras del grupo. El local tenía muchos vestidos  blusas, todo de algodón, delgadísimo, especial para temporada de verano. Varias compraron. Yo no lo hice porque lo que me probé me quedaba muy largo para mi pequeña estatura, 😁.  Luego regresamos al hotel, ya siendo las 19 horas. Media hora más estábamos cenando y no tuve ninguna posibilidad  de usar las piscinas , que a las 20 terminaban de funcionar. 

   Después  de una cena bien conversada con Nelsi y Maria Elena, nos fuimos a nuestras piezas, a arreglar equipaje y a lavar, en mi caso.  Ordené todo todo, pues lo comprado lo puse al fondo y la ropa encima. Quedó mejor. Al día siguiente, partiriamos rumbo a CAPADOCCIA.  Iba a ser el trayecto más largo por recorrer, 614 kms.en bus. ¡Uff! Salimos después del discurso de despedida de Claudio Iturra, quien viajaba a Chile. Partimos a las 9 de la mañana. Teníamos un largo trayecto, que terminaría en la llamada "Ciudad de las Hadas". ¡Bellísima! Ya les contaré. Hasta pronto.





domingo, 21 de abril de 2024

Retrocediendo al Mundo Antiguo ...

  

   Este par de días ha sido una mezcla extraña. Mientras a las 10 a.m.del sábado visitábamos una Fábrica de prendas de cuero, con desfile de modas incluido, bajo una copiosa lluvia, cerca del mediodía fuimos a recorrer el lugar en que se ubicó la Segunda y última casa de la Virgen María. Parece poco creíble esta información, sobre todo para una persona descreída como yo, pero, si bien la casa no está consagrada (¿así se dirá?), la monja alemana que tuvo las visiones de la Casa de la Virgen sin haber nunca salido de su pueblo, fue beatificada por el Vaticano. Y aunque esta institución ha perdido "algo" de la confianza del mundo católico, aún tiene su peso en el ámbito religioso cristiano. Por lo demás, cualquier proceso de beatificación o canonización siempre implica una investigación exhaustiva de años, dando mayor veracidad a lo investigado. Como pueden ver, fueron dos actividades contrapuestas, una superflua y la otra espiritual, que no deja de afectar la mirada, que no alcanza a prepararse para la visita trascendente desde una perspectiva humana.

  Lo increíble de la segunda situación, es que Anna Katharina Emmerick, sin conocer mundo ni haber salido del suyo en Alemania, dejó constancia por escrito de sus visiones en un libro, el que sirvió de base para una expedición emprendida por unos religiosos, que con las indicaciones dejadas por la monja alemana, después de casi 70 años de que ella había muerto, fueron capaces de hallar la casa en que la Madre de Jesús vivió sus últimos años. ¿Cómo llegó María hasta ÉFESO, a siete kilómetros de la localidad de SELÇUK? Jesús, según se estipula en la Biblia, antes de morir le encomendó su madre al apóstol San Juan. Éste la alejó de las persecuciones de los cristianos, trayéndola hasta este lugar, donde la estableció con una casa. Allí vivió hasta su muerte. Lo que existe en la actualidad en el lugar es una Capilla que se ha restaurado más de una vez, sobre los cimientos de la vivienda original del siglo I. Como un visitante más, entré a la Capilla, pero nada de lo que allí había tuvo sentido para mí salvo en el ámbito de lo intelectivo, lamentablemente. Aún así, compré una velita para Mirella, mis padres y mi hermano Ernesto. Allí dejé la vela encendida ardiendo con ímpetu; ya es un rito para mí cuando viajo lejos. Lo que no hice, eso sí, fue lavarme la cara o tomar agua "bendita" de unas llaves para purificarme.Tampoco dejé un mensaje o deseo por escrito en la muralla disponible para ello. 

  Destaco de la visita anterior su carácter histórico y la tremenda importancia que para mucha gente tiene este lugar de peregrinación. Obviamente para todos los cristianos, desde Papas a fieles comunes y corrientes. Incluso para los turcos, que en cantidad numerosa estaban y llegaban al lugar, como lo hizo notar la guía local. Los turcos la llaman Meryemana ('madre María ').

   Luego de participar en estas dos actividades y lograr sortear la lluvia, que a eso de las 14 horas ya había desaparecido y retrocedido, fuimos a almorzar a un restaurante  que, al mismo tiempo, es un Museo de Trenes. No entramos a ver las dependencias de exhibición específicamente,  pero pudimos ver un par de máquinas mientras nos dirigíamos al almuerzo, que era estilo buffette, rico, aunque no tan variado.  

   [Entre paréntesis: la visita a la Fábrica de Cuero con Desfile de Modas fue maravillosa para varios viajeros, que salieron "cascando" con una o más prendas de cuero de cordero especialmente trabajado, para obtener como resultado una vestimenta suave, liviana, bella y...¡muy cara, 😁😁! Entre rebajas reales o inventadas como estrategia, lo mínimo que se pagaba eran desde unos 650 euros hasta unos 800 o más, según el tamaño de la prenda y sus "gracias". En esta ocasión  pasé a formar parte de la familia Miranda ("que mira y anda", 😅), a pesar de ser casi perseguida por una vendedora. Estuvimos un buen rato allí, mientras afuera "llovía y llovía...🎶🎶 ". Cuando los compradores terminaron de usar sus tarjetas ultrapoderosas, nos fuimos a la Casa de María. Cierro paréntesis].    
     Después de almorzar nos llevaron a un pueblito cercano llamado ŞIRINCE , donde visitamos un sector con una multitud de locales de artesanía, restaurantes, cafeterías y bodegas de vino turco. Al pueblo se le asocia, porque forma parte importante de su quehacer económico, a la producción de vinos y está, de hecho, rodeado de viñas. El pueblito artesanal se ubica en un sector de relieve irregular, con subidas y bajadas, con unas calles de adoquines de piedra laja irregulares. Había que caminar con cuidado. La caminata por estas callejuelas me recordaron mucho, en su conformación, al sector artesanal que rodea el Cerro Monserrate de Bogotá. Fue una delicia vitrinear, 😁 😁,  por estas callecitas.    
    Después de este recorrido por las callecitas de Şirince, nos fuimos al hotel a descansar. Llegamos pasadas las 18 horas y quisimos sacarle provecho a nuestra última tarde con un par de compañeras de viaje, Alicia y Nancy. Nos volvimos a juntar para la cena  -19,30- y luego nos fuimos al centro de Kuşadasi en un taxi pedido por un recepcionista del hotel. Fue una grata experiencia caminar por dos horas por el centro de la ciudad, que no conocíamos, vitrinear a destajo, sacar fotos, comprar una que otra cosilla. Vimos una tienda con chaquetas de cuero y fuimos a curiosear los precios y la calidad del trabajo (¡nosotras, las más entendidas!). Si bien la calidad no era tan diferente, los precios eran menos de la mitad de las prendas vistas en la mañana. Estuvimos mirando y consultando. Me había entusiasmado una chaqueta de cuero con flores y reversible, pero no había del color que quería. Me gustó también  una especie de capa, pero tenía un cuello de piel de chinchilla cuyo color desentonaba con el resto, así que no, caballero, vamos a volver mañana, 🙈. Nancy  fue la primera en decir que iría al día siguiente, cosa imposible pues nos íbamos a otra ciudad. Tengan la seguridad que si la prenda me hubiera convencido totalmente me la compro, pero no fue así. Seguimos caminando hacia el mar y ,¡oh!, veo unas zapatillas iguales a las que compré el 2023 en Estonia. Consulté y el valor era un poquito menos, pero del modelo sólo había en color blanco. Desistí, pero más allá, de nuevo las zapatillas guiñándome un ojo, 😜 . Consulté y comenzó la ganga con 200 liras turcas menos (casi 6 mil pesos). El hombre sabía español y quería vender. Pedí otro color y no había en el número del mismo modelo. Debí resignarme, 🙈 , pero como el turco quería hacer negocio me ofreció más rebaja. Yo no acepté por el color. Iba a media cuadra y me dije: ¡Qué  tanto!, ¡las compro igual! Retrocedimos y como turco que se precia de tal, había "olvidado" la oferta. Empecé a regatear hasta que logré 25 euros. Las zapatillas lo valían (son de cuero). Okey, dije, las llevo y justo llevaba sencillo de 25 € , así que a probarlas y listo. En Estonia me habían costado 40 €, 😂 😂.  

   Seguimos caminando, tomando fotos, disfrutando de la agradable noche. Andaba gente en la "Costanera", especialmente jóvenes. Decidimos volver a las 22,30. Buscamos un taxi con paradero y nos llevó sin inconvenientes hasta el hotel. Una vez allí, calabaza calabaza, pues teníamos que preparar la maleta.

  ÉFESO (Efesus) fue en la Antigüedad una ciudad del Asia Menor, importante centro religioso, cultural y comercial. Desde su fundación (aproximadamente en el siglo X a.C.) múltiples pueblos pasaron por Éfeso, partiendo por los jonios y las amazonas, según las leyendas en torno a su creación, hasta los persas, atenienses, los espartanos, los macedonios con Alejandro Magno. ¡Uff! Los romanos también camparon a sus anchas por estos lares, Sila, Pompeyo, Marco Antonio con su Cleopatra, etc., hasta que llegaron los godos, los árabes, los turcos. Realmente fue la Joya de la corona antes y después del inicio de la cristiandad, la que trae toda una significación especial al lugar, que aparece corroborada en la Biblia con la "Carta a los efesios". San Pablo, San Juan, la Virgen María tuvieron una presencia gravitante también y muchos más. Pero dejo hasta aquí su resumida historia pues no soy experta (incluso puede haber más de un error por lo que pido disculpas a mis amigas historiadoras) ni es el objetivo de este escrito. Sólo quería dejar sentado que si hay un lugar relevante en la historia antigua y posterior es Éfeso.     

   Desde 2015 es Patrimonio de la Humanidad. Es uno de los complejos arqueológicos más importantes del mundo, que dan cuenta de la vida en los tiempos antiguos. Entre los monumentos destacados de los cuales aún quedan vestigios en Éfeso está el Templo de Artemisa (una de las 7 maravillas del mundo antiguo; sólo una columna), la Biblioteca de Celso o Celsius, la Basílica de San Juan (con la tumba del santo), el Gran Teatro Romano, el Teatro de Odeón, el Templo de Sebastoi, el Templo de Adriano, la Plaza de Mercado o Ágora, el Acueducto, las Termas de Vario, la Puerta de Heracles, el Ninfeo (o fuente) de Trajano y otros (un hospital, unas letrinas públicas, casas particulares, etc.). Por todo el sitio arqueológico estuvimos este domingo, caminando por las mismas calles y avenidas que han caminando tantos durante tantos siglos. Fue un verdadero privilegio. Con lo visto en este lugar ya me siento pagada y satisfecha, aunque sé que aún faltan maravillas por ver y disfrutar.  
       Después  de caminar por Efeso antiguo, subimos hasta el Castillo de Ayasuluk-Selçuk, ubicado en lo alto de la colina, cercano a la Basílica de San Juan. Subimos hasta allá, con mucho cuidado pues hay un tramo del trayecto con un camino irregular, y desde la altura tuvimos la panorámica de todo el valle, con sus viñas y campos cultivados, mientras, a lo lejos, se divisaba el Mar Egeo. Esta construcción es de carácter defensivo, de origen medieval, cuyas murallas aún se conservan mayoritariamente, así como una Capilla, unas cisternas y otros sectores. Desde los parapetos superiores pudimos respirar a pleno pulmón y descansar del esfuerzo de la subida. 

  Bajamos cuando ya eran las 14,30. El hambre acuciaba, la que saciamos en un restaurante cercano. Posteriormente, nos subimos al bus y nos dirigimos hasta la ciudad de Pamukkale ("castillo de algodón") donde contaré otra historia. Hasta pronto.