domingo, 23 de agosto de 2020

El beso azul

     
El besar azul de la lluvia cuando cae y  se derrama en la tierra, permitiendo la vida y la esperanza es lo que recordó Rogelio de los versos de García Lorca mientras subía la maldita escalinata de Mauthausen. La lluvia que al caer llevaba consigo y diluía la sangre de las víctimas y actuaba como elemento purificador y dador de vida. Aquello salvó su espíritu. 
    El beso azul, novela de Jordi Sierra, pareciera ser el contrapunto de la novela Inés  y la alegría de Almudena Grandes. Mientras en la segunda, Inés vive la derrota republicana en el destierro en la nación francesa y, pasados los años, regresa sin saber lo que ha sucedido con los que se quedaron, salvo generalidades, Rogelio regresa también cuando el dictador ha muerto, pero en conocimiento acabado de lo que ha pasado en su pueblo y sólo con dos dudas: quién los traicionó y por qué no murió como los otros.    
   Rogelio Castro, republicano fusilado el año 36 en un pequeño pueblo entre Valencia y  Madrid, vuelve a la vida el año 1977, ya muerto Franco hace más de un año, cuando su hermana Virtudes devela su gran secreto: que desde hace 20 años intercambia correspondencia con él desde Colombia y que ha decidido venir de visita. Una vez todos se enteran,  la imagen del "resucitado", más amenazante que esperanzadora,  se cierne sobre los de "ese" tiempo: la que fuera su prometida (casada con su mejor amigo desde hace años), el hijo del que dirigiera el pelotón de fusilamiento (autoridad máxima de la localidad al igual que lo fuera su padre), otro de los sobrevivientes del pelotón (amigo de Rogelio antes pero en bandos contrarios una vez empezara la guerra), otro amigo sobreviviente,  oculto casi 37 años bajo el piso de su casa...y los hijos de aquellos que no logran entender del todo lo que se avecina, pues, además  de no haber vivido la guerra fratricida,  desde pequeños escucharon a sus padres decir "de ese tema  no se habla". 
    Una novela que nos habla de la delgada línea  entre la justicia y la venganza, entre el perdón y el olvido. 
(23 de agosto de 2020)

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